Las negociaciones para que el español vuelva al banquillo de Tricolor de basquetbol se encuentran estancadas de cara a los Juegos Panamericanos

El regreso de Sergio Valdeolmillos está costando más trabajo del esperado por el director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Alfredo Castillo, quien hoy sólo tiene el acuerdo de palabra y la esperanza de firmarlo en breve.

Seguimos con el tema del contrato, estamos viendo los detalles en toda la parte legal y una vez que estén solventadas las transferencias y pagos podremos hacer el anuncio’, admitió Castillo durante un recorrido por el CNAR de la ciudad de México.

Por esa razón la semana pasada Castillo sólo dijo que Valdeolmillos había aceptado dirigir a México en los Juegos Panamericanos y el Mundial, pero se negó a dar detalles de concentración o salarios.

Valdeolmillos quiere asegurarse la mayor estabilidad posible, por eso un grupo de abogados suyos viajó a México para llevar a cabo la negociación directamente con los representantes de Conade. Una de las trabas es quién pagará a esos litigantes.

Al momento, ni Valdeolmillos ni su eventual cuerpo técnico han enviado sus pasaportes para comenzar el proceso de acreditación a los Juegos Panamericanos de Toronto que inician en 52 días. Sergio se ha limitado a decir que “se está intentando arreglar todos los temas”.

Los negociadores de Conade han recriminado las exigencias de los representantes de Valdeolmillos al asegurar que “si quiere el Castillo de Chapultepec como garantía”, pero la respuesta de ellos es que su cliente vendrá hasta que tenga las condiciones a favor.

Conade solicitó la intervención de Juan González, presidente de la LNBP, para que negocie la preparación de la selección, pero ni Valdeolmillos ni Ayón están dispuestos a hablar con él.