Más de 250 muertos dejó intento de golpe en Turquía

Al menos 173 de ellos eran civiles y 62 eran policías, además el intento fallido dejó mil 535 heridos

Al menos 264 personas murieron durante el fallido golpe de Estado del pasado fin de semana en Turquía, entre ellos 173 civiles, según el último recuento hecho público hoy por la agencia de noticias Anadolu.

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Entre las víctimas se cuentan 62 policías y cinco soldados leales al gobierno y 173 civiles, a lo que se añaden mil 535 heridos.

Entre quienes participaron en el golpe hubo 24 muertos y 48 heridos, precisa la agencia, confirmando así la cifra avanzada ayer por el primer ministro, Binali Yildirim.

El lunes, el Ministerio de Exteriores informó sobre “más de 100 conspiradores golpistas capturados muertos”, dato que ahora parece desmentido.

La gran mayoría de los policías fallecidos al enfrentarse a los golpistas murieron en Ankara, con 55 víctimas, frente a cinco en Estambul, y dos en el asalto al hotel de Marmaris donde se hospedaba el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, y que fue atacado poco después de que lo abandonara.

El balance de civiles fallecidos en los dos principales escenarios del golpe es de 78 en Ankara y 94 en Estambul.

De los mil 535 heridos, la inmensa mayoría civiles, 623 siguen ingresados, agregó Anadolu.

El total de arrestados como consecuencia del golpe alcanza las 8 mil 660 personas, de los que 6 mil 139 son soldados- entre ellos 115 generales y mil 350 oficiales de rangos inferiores- y mil 481 jueces y fiscales.

Hasta ahora, 990 personas han pasado a prisión preventiva.

Paralelamente, varios ministerios han puesto en marcha operaciones para suspender del servicio a funcionarios sospechosos de simpatizar con los seguidores del predicador exiliado Fethullah Gülen, acusado por Ankara de ser el cerebro del golpe.

Según diversas noticias difundidas en los medios turcos, el total de empleados públicos suspendidos, la mayoría dependientes de Interior y Educación, supera los 27.000.

Además se ha prohibido, salvo autorización de los superiores, que los funcionarios viajen al extranjero y se han anulado las vacaciones anuales de verano, conminándose a los empleados a que regresen a sus lugares de trabajo.

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