El secretario general del Sindicato de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Nayarit (SPAUAN), Carlos Muñoz Barragán, consideró que será en este próximo Congreso Nacional -a celebrarse a finales de este mes de noviembre en Guadalajara, Jalisco, al que convocó la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios- cuando se defina si continúan o no con los paros escalonados de protesta como el del pasado 20 de octubre, ante los recortes presupuestales a las universidades públicas del país, porque ahí se sabría si lograron rescatar recursos para el ejercicio fiscal 2017.

Recordó que en el pasado Congreso de Guanajuato se tomó el acuerdo que con anticipación iniciaron desde antes del mes septiembre que originalmente ser contempló el día 20 del primer paro escalonado.

Sin embargo, precisó que a este respecto se hicieron declaraciones sobre el congreso universitario de Toluca y ahí se decidió diferir el paro escalonado para el 20 de octubre, fecha en que se llevaron a cabo las protestas tanto el SPAUAN como el SETUAN que lidera el diputado Luis Manuel Hernández, de manera conjunta con la colocación de mantas y declaraciones a los medios de comunicación local y nacional.

De esta forma, anotó Muñoz Barragán, también se solidarizaron con la CONTU y sólo estarían en espera del Congreso de Guadalajara este próximo fin de mes, para ver qué es lo que se pudo rescatar del presupuesto federal y las posturas que tomarían en lo sucesivo.

Sobretodo, subrayó, porque una vez aprobado el presupuesto federal, ya no se le puede mover.

“Entonces, vamos a tratar de seguir una estrategia apoyando al rector Ignacio Peña para ir previendo todas las situaciones que se presenten”, apuntó.

Muñoz Barragán hizo notar que la situación de crisis financiera en la UAN por el desvío de recursos por más de 300 millones de pesos, perjudica a esta casa de estudios porque del “árbol caído, se hace leña”.