El Presidente de la Red estatal de la Diversidad Sexual en Nayarit catalogó como peor el hecho de que ni gobierno ni sociedad trabajen para hacer algo al respecto

Omar Cordero, Presidente de la Red estatal de la Diversidad Sexual en Nayarit, dijo que el asesinato de Sheyla, una chica ‘trans’, que ejercía el trabajo sexual en el centro histórico de la ciudad, ha dejado claramente evidenciado que en el estado aún persisten los crímenes de odio contra las personas LGBTTTI, pero catalogó como peor el hecho de que ni gobierno ni sociedad trabajen para hacer algo al respecto.

Comentó que tanto los gobiernos municipales así como el del estado se han desentendido total y completamente de este sector vulnerable, pues incluso, las chicas ‘trans’ también entran bajo la protección activada en la alerta de género emitida para 7 de los 20 municipios en la entidad, no obstante señaló que tampoco se ha trabajado de manera idónea dicha alerta.

“Son vulneradas simplemente por el trabajo sexual que ejercen, ya vimos hace días que el gobierno municipal quería retirarlas en vez de darles más oportunidades, de buscarles mejoras, de buscarles accesos a la seguridad pública, a quien ejerce el trabajo sexual debemos ayudarlas a tener políticas públicas para el trabajo sexual”, expresó.

Sobre la muerte de Sheyla, señaló que directamente es un crimen de odio del cual no se debe desviar la atención y la información, pues nada tiene que ver con haberse inmiscuido en la delincuencia organizada.

“Es un crimen de odio como tal, no podemos decir que es parte de la delincuencia organizada, parte de todo lo que se está dando en el estado, nada tiene que ver porque fueron a matarla directamente”, dejó en claro que esta persona era el sostén de su familia por lo tanto trabajaba en el oficio sexual al no ser contratada por su condición sexual.