El posible proceso del juicio político contra Donald Trump en el Senado podría obstaculizar los debates presidenciales de los candidatos demócratas en enero de 2020, reporta The Wall Street Journal.

Mientras que se desconoce tanto la fecha como la duración del potencial juicio —el proceso similar en torno al expresidente Bill Clinton duró más de cinco semanas— el Senado podría reunirse seis días a la semana para llevar a cabo los respectivos procedimientos a partir de enero.

Esto limitaría el número de días en los que los candidatos demócratas que aspiran a la presidencia de EE.UU. en las próximas elecciones y a la vez son senadores, como Bernie Sanders o Elizabeth Warren, podrían presenciarse en el debate televisado.

Además, el asunto se complica porque el Comité Nacional Demócrata se empeña en evitar que el debate coincida con las eliminatorias de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), que se disputarán durante los primeros tres fines de semana del mes, y también con el foro presidencial Iowa Brown & Black en Des Moines, el 20 de enero.

En el caso del juicio político contra Trump los candidatos demócratas que forman parte del Senado tendrán que ejercer como jurados durante el proceso, algo que podría impedirles centrarse en su propia agenda electoral ante las primarias del 3 de febrero, que tendrán lugar en el estado de Iowa.

Entre los demócratas que aspiran a ser postulados por su partido como candidatos presidenciales hay cinco senadores. Además de Bernie Sanders y Elizabeth Warren, se trata de Amy Klobuchar, Cory Booker y Michael Bennet.