Beyoncé recordó los primeros atuendos que su madre y su tío diseñaron y cosieron, con pasión en cada detalle

Beyoncé se apareció de sorpresa el lunes por la noche en la ceremonia de los Premios CFDA del Consejo de Diseñadores de Moda de Estados Unidos para aceptar, con un emotivo discurso, el galardón Ícono de la Moda.

“Desde que tengo uso de razón, la moda siempre ha sido una parte de mi vida”, dijo la superestrella del pop, quien relató cómo su abuela, quien era costurera, le transmitió ese don a su madre.

“Cuando empezamos como Destiny’s Child, las marcas de lujo realmente no querían vestir a cuatro chicas de campo negras y curvilíneas. Y no podíamos darnos el lujo de comprar vestidos y trajes de diseñador”, relató. “Mi madre usó su talento y su creatividad para realizar los sueños de sus hijos”.

Beyoncé recordó los primeros atuendos que su madre y su tío diseñaron y cosieron, con pasión en cada detalle, dijo.
Por lo general los organizadores de los Premios CFDA (siglas del consejo en inglés) anuncian el nombre de la persona agasajada como Ícono con anticipación, pero este año lo mantuvieron en secreto hasta el final de la gala, cuando la diseñadora Diane von Furstenberg subió al escenario para presentar a la cantante, de la que dijo que representa lo que toda mujer aspira ser.

“La imagen de una mujer a cargo nunca lució más glamorosa”, dijo.

La sorpresa de Beyoncé fue uno de los platos fuertes de una noche que también incluyó un emotivo homenaje al difunto David Bowie de su amiga, la actriz Tilda Swinton, cuyo discurso fue una carta dirigida al músico.

También fue homenajeado el astro pop Prince, fallecido en abril, con una actuación de Jennifer Hudson que incluyó una impactante interpretación de su tema “Let’s Go Crazy”.

Los premios principales fueron para Marc Jacobs, como diseñador de ropa masculina del año; Thom Browne, por su colección de ropa de hombre y a Rachel Mansur y Floriana Gavriel por su línea de accesorios.

Norma Kamali, famosa por sus abrigos tipo “saco de dormir” y sus trajes de baño, incluyendo el rojo que Farrah Fawcett usó en su famoso póster, recibió el premio a la trayectoria de manos de Michael Kors, mientras que Donna Karan obtuvo el Premio del Fundador de su amigo, el diseñador Calvin Klein.

Los tres premios de Swarovski para diseñadores emergentes fueron para Paul Andrew por accesorios, el sello Orley por su ropa de caballero, y Brandon Maxwell por su línea de ropa para mujeres.

Pero el show sin duda se lo robó Beyoncé, quien elogió a los diseñadores de moda como hadas madrinas, magos, escultores e incluso terapistas.

“Los exhorto a no olvidar el poder que tienen ni a tomarlo a la ligera”, les dijo la cantante. “Tenemos una oportunidad de contribuir a una sociedad donde una niña puede ver un cartel o la portada de una revista y ver su propio reflejo”.