Familias completas, estudiantes e incluso una pareja de recién casados son algunas de las víctimas canadienses que estaban a bordo del avión ucraniano que se estrelló este miércoles en Irán poco después de despegar con rumbo a Kiev.
En el Boeing 737-800 viajaban 63 ciudadanos de Canadá para realizar conexión a Toronto, luego de viajar a Irán en sus vacaciones de invierno, según informó este miércoles el primer ministro canadiense Justin Trudeau, quien prometió a las familias de las víctimas obtener todas las respuestas que expliquen qué pasó con la aeronave.
Aunque Irán informó que el accidente donde murieron 176 personas se debió a un fallo técnico, siguen las dudas sobre si se trató de un ataque deliberado.
Las víctimas canadienses tenían vínculos con las ciudades de Quebec, Ontario, British Columbia, Manitoba y Alberta. Se cree que al menos 30 vivían en Edmonton y que varios más estudiaban o trabajaban en universidades en todo el país, según reportó la cadena pública canadiense CBC.
Quiénes eran las víctimas
Mohammad Mahdi Safeghi, su esposa Bahareh Hajesfandiari y la hija de ambos Anisa Sadeghi están entre las víctimas. Esta familia regresaba a Winnipeg tras visitar Irán.
Mojgan Daneshmand y su esposo Pedram Mousavi eran profesores de la Universidad de Alberta. Eran miembros de la comunidad de 4,600 iraní-canadienses de Edmonton y estaban en el avión junto a sus hijas Daria y Dorina.
«Hemos perdido a una porción significativa de nuestra comunidad”, dijo Payman Parseyan, expresidente de la comunidad Iraní en Edmonton a la radio CBC. «Todos los que en Edmonton tienen ascendencia iraní conocen a alguien que estaba en ese vuelo”, aseguró.
Solo una coincidencia explica que tantos residentes de Edmonton estuvieran en el mismo avión, agregó Parseyan.
Arash Pourzarabi, de 26 años, y Pouneh Gourji, de 25, también pertenecían a la comunidad de Edmonton. Ambos eran graduados en Ciencia de la Computación de la Universidad de Alberta. Habían viajado a Irán para celebrar su boda el viernes pasado, según el Edmonton Journal.
Junto a ellos, varios amigos y familiares que los habían acompañado a la boda también fallecieron en la tragedia.
La Universidad de Alberta, que tenía conexión con varias de las víctimas, expresó sus condolencias a través de un mensaje en redes sociales.
Varios de los pasajeros eran estudiantes, según informó la agencia de noticias iraní ISNA. Delaram Dadashnejad, de 27, se había graduado recientemente con un certificado en Inglés de la Universidad de Langara, en Vancouver.
Mari Foroutan, de 37, era candidato a doctor en la Universidad de Waterloo, y Ghanimat Azdahri, era estudiante de doctorado de la Universidad de Guelph, ambas instituciones de Ontario. La universidad de Ottawa confirmó que tres de sus estudiantes también iban en el avión, según informó The Guardian.
Junto con su compromiso por investigar el accidente, el primer ministro Trudeau aseguró que “es peligroso especular sobre las posibles causas”.
El Ministerio de Transporte de Irán ha explicado que el avión sufrió un incendio en un motor y el piloto perdió el control. Las autoridades de ese país han achacado lo ocurrido a un fallo mecánico.
Sin embargo, las dudas persisten, principalmente por la crisis militar entre Estados Unidos e Irán, que llevó a las principales compañías aéreas a desviar sus rutas para evitar el Medio Oriente. La Administración Aérea estadounidense prohibió a las aerolíneas de este país sobrevolar una zona del Golfo Pérsico por temor a “la posibilidad de un error de cálculo o de identificación”.
Canadá tiene una de las comunidades de descendientes iraníes más grandes, con unos 210,000 residentes provenientes de ese país, según el último censo.
Sin embargo, el país norteamericano suspendió sus relaciones diplomáticas con Teherán y cerró su embajada en 2012, lo que sumado a las sanciones de Estados Unidos a Irán, han elevado los costos y aumentado las dificultades para viajar entre esos países.