El técnico español augura un difícil partido de cuartos en Champions, mientras Philip Lahm considera que pudo ser un rival más incómodo

Porto de Portugal y Bayern Múnich de Alemania, volverán a chocar en Champions League, ahora en cuartos de final, un duelo que el español Josep Guardiola, timonel de los bávaros, negó vaya a ser sencillo.

El historial entre ambos en esta competencia cuenta con varios capítulos, no obstante el recuerdo de más peso radica en el triunfo de los “Dragones” en la final de 1987, mismo que significó la primera “Orejona” para el club lusitano.

Tras conocer la llave que los emparejó en el sorteo celebrado en la ciudad suiza de Nyon, Guardiola adelantó que ya tienen antecedentes del estilo de juego del conjunto que dirige su compatriota Julen Lopetegui y que no se guardará nada.

Todos los equipos tienen una calidad especial. Porto y Shakhtar estaban en el mismo grupo, así que ya hemos visto algunos de sus partidos. El Porto tiene un gran equipo y un bonito estadio. Es muy fuerte físicamente y ataca con mucha velocidad, pero en los cuartos de final no puede esperarse un partido fácil’, sostuvo.

Tras perder aquel duelo decisivo, el equipo teutón ha cobrado revancha un par de veces y justamente en esta ronda de los mejores ocho, primero en la campaña 1990-1991 y después en la 1999-2000; sin embargo, el Porto comandado por el mexicano Héctor Herrera es capaz de inquietar a los líderes de la Bundesliga.

Cuenta con delanteros muy rápidos. Es un equipo joven que no ha perdido un solo partido en esta Champions League. Vamos a intentarlo todo’, espetó Guardiola.

En cambio, el capitán del Múnich, Philipp Lahm, consideró, “podríamos haber tenido un rival más incómodo”, aunque también reconoció que sus adversarios se instalaron en esta instancia de forma convincente.

En el futbol de hoy no importa demasiado si juegas la ida en casa o fuera. El Porto es un equipo que no simplemente defiende atrás sino que también quiere tomar la iniciativa. Tendremos más posesión en ambos partidos, así que todo dependerá de nuestra actuación’, precisó.

El guardameta bávaro, Manuel Neuer, atribuyó gran parte del éxito de los portugueses al ambiente que son capaces de fabricar en su casa. “Con esa afición no será fácil para nosotros pero hemos jugado en diferentes estadios y ya sabemos lo que nos espera”.

Los sublíderes de la Liga de Portugal recibirán primero, en el Estadio Do Dragao y a la semana siguiente viajarán a territorio alemán para meterse al Allianz Arena, estadio en el que ningún equipo ha podido festejar siquiera una anotación en lo que va del certamen.