Trabajadores del Ayuntamiento de Mazatlán depositaron en un camión de la basura, los restos de un cetáceo

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) reprobó la actuación de trabajadores del Ayuntamiento de Mazatlán, Sinaloa, que depositaron en un camión de basura los restos de un delfín que apareció varado en la playa, sin dar aviso para atender de manera correcta la situación.

La PROFEPA exhortó a todos y cada uno de los tres niveles de gobierno a apegarse al Protocolo de Atención para el Varamiento de Mamíferos Marinos, a fin de que se lleve a cabo la estricta vigilancia y cumplimiento de las normas ambientales vigentes en el país.

A través de un comunicado de prensa, destacó que la delegación en el estado no recibió ni una llamada ni un aviso que denunciara el descubrimiento del delfín muerto “que fue tratado de manera equivocada en su destino final”.

Agregó que el actuar del personal del Ayuntamiento de Mazatlán impidió que los inspectores federales levantaran el acta correspondiente y se procediera a la toma de muestras para determinar las causas del deceso del ejemplar.

El Protocolo de Atención para el Varamiento de Mamíferos Marinos señala que “tratándose de organismos muertos, la PROFEPA determinará la disposición final de los residuos generados o, en su caso, de los cadáveres, atendiendo a las características del ejemplar, el tipo de varamiento y las condiciones ambientales del lugar, con el apoyo de las autoridades del gobierno municipal o local o de la Secretaría de Marina, en el ámbito de sus respectivas competencias”.

“Ante tan lamentable acontecimiento y espectáculo presenciado en playas de Mazatlán, la PROFEPA emitirá una recomendación a todos los municipios costeros para que se apeguen al Protocolo de Atención para el Varamiento de Mamíferos Marinos”, manifestó.

De acuerdo a la Ley General de Vida Silvestre y la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, no se deben mover a los organismos varados, vivos o muertos, ni devolverlos al agua, ya que en el caso de animales vivos se requiere realizar una evaluación médica que determine su estado de salud para saber si requieren de atención veterinaria; y en el caso de organismos muertos es importante que la autoridad realice una revisión y de ser posible, se tomen muestras para determinar las causas de la muerte.