Enfrenta tus miedos al rechazo y consigue una pareja como la que siempre has querido
El experto en relaciones para Match.com, Mario Guerra, nos platica sobre los miedos al rechazo y cómo eso impide encontrar una pareja sana y que nos llene de amor.
Iniciar una relación no suele ser sencillo para algunas personas y para otras, esto resulta poco menos que un acto heroico que suele terminar en una huída, incluso antes de intentar cualquier acercamiento. El miedo al rechazo es a la vez causa y consecuencia de muchas de nuestras frustraciones en el amor y, como todos los miedos, puede ser un gran motor que nos haga huir o una enorme muralla que nos paralice en la vida.
Para los que no lo padecen parece muy sencillo y hasta lógico intentar encontrar una pareja de la manera más directa; acercándose a la persona que les interesa y viendo si les corresponde. Pero para quien teme ser rechazado las cosas son distintas. Su miedo se proyecta hacia el futuro, anticipando un resultado negativo, producto de una o varias creencias distorsionadas del tipo “no merezco que me amen”, “mi destino es estar en soledad” o “no valgo nada”.
Remover este miedo no es sencillo pero, si lo piensas, parece que su intención es protegerte de que te lastimen o de hacer el ridículo. Sus intenciones son buenas, pero sus métodos son muy drásticos. Vamos a ayudar un poco a que tu miedo se sienta más seguro y quizá empiece a colaborar contigo dejándote ser más libre de intentar algo nuevo en el amor.
No combatas al miedo
Tratar de convencerte de que “no pasa nada” o de que “el no ya lo tienes” no suelen ser estrategias útiles. Tampoco ayuda verlo como un enemigo a vencer o algo que te fastidia la vida. Recuerda que es alguien que quiere cuidarte. Escucha sus objeciones que pueden ser del tipo “vas a quedar en ridículo”, “pensará que eres un tonto” o “¡no lo hagas!”. Escucharlas no te obliga a obedecerlas o ni siquiera creerlas; son cosas que tu miedo piensa, así que agradécele que quiera alertarte y vamos al siguiente paso.
Duda de sus certezas
Tu miedo cree tener el poder de ver el futuro. La realidad es que a veces acierta pero muchas otras no. Tu miedo no lo sabe todo, así que conversar con él un poco podría tranquilizarlo; por ejemplo:
Miedo: No le hables, seguro se burla de ti en tu cara.
Tú: Es verdad que puede pasar eso, pero también puede ser que no lo haga.
Miedo: ¡Seguro lo hace!
Tú: ¿Y si no lo hace?
Miedo: ¡Lo hará!
Tú: No estoy tan seguro, no tendría por qué hacerlo; voy a intentarlo.
Recuerda que no se trata de contradecirlo o invalidarlo, sino de ayudarlo a dudar de sus certezas y ofrecerle un panorama de posibilidades. Tampoco trates de ser demasiado optimista con él, lo mejor es…
Ser realista
Tus probabilidades de que alguien te rechace son bastante altas, pero eso es perfectamente normal. Por ejemplo, un estudio afirma que de cada 10 intentos que tenemos al acercarnos a una persona con fines amistosos, sólo se tiene en éxito en 3; es decir, 7 personas no querrán establecer una relación con nosotros e incluso un porcentaje de éstas quizá ni nos devuelva un simple “hola”. Esta estadística se estableció como válida a nivel mundial para lo que llamaríamos un adulto promedio. ¿No lo crees? Haz la prueba. Lo que me lleva a pensar que, si estás en búsqueda de pareja, lo mejor será primero establecer una relación de amistad con varias personas y partir de ahí para ver cuál de ellas puede ser de tu interés, y tú para ella, para algo más.