Una disputa familiar el jueves por la noche, produjo un tiroteo que terminó con la muerte de cinco personas; la policía informó que se trata de una familia marroquí
Los cadáveres de tres hombres y dos mujeres fueron hallados en una casa en el norte de Phoenix tras un tiroteo por una presunta disputa familiar, informaron las autoridades.
La policía informó el jueves por la noche que los tres hombres eran hermanos y las dos mujeres al parecer eran la madre de los tres y la esposa de uno de ellos. Otras dos mujeres y dos niños lograron escapar ilesos.
Una mujer que logró salir de la casa dijo a los agentes que se trataba de una disputa familiar que se salió de control, de acuerdo con el sargento Trent Crump, portavoz de la policía.
“Nuestro operador podía escuchar los disparos al fondo durante la llamada”, dijo Crump. “Una persona que hizo la llamada pudo escapar de la casa en ese momento, salió y empezó a darnos información”.
El policía informó que la familia es originaria de Marruecos. Durante el atrincheramiento que duró varias horas antes de que fueran hallados los cuerpos, la policía utilizó un altavoz para tratar de comunicarse con los habitantes de la casa, hablándoles en árabe.
No se difundieron los nombres de las víctimas por el momento.
El diario The Arizona Republic reportó que un vecino dijo que la familia era propietaria de una empresa de transportes. Como sólo tenían permitido estacionar dos vehículos en la rampa de su casa, la familia compró una vivienda en un vecindario cercano para poder aparcar su flota, de acuerdo con el periódico.
Se desconoce cuántas personas realizaron los disparos, pero la policía señaló que no busca a ningún sospechoso en especial.
Los policías encontraron los cadáveres al finalizar el atrincheramiento que duró varias horas. Vecinos dijeron que escucharon el ruido sordo de disparos aproximadamente una hora después de que los integrantes se parapetaron en el interior.
Imágenes de la televisión mostraron a agentes del equipo táctico SWAT rompiendo una puerta trasera de cristal para ingresar a la vivienda. Los agentes usaron un robot para inspeccionar la casa antes de enviar a un perro y a los agentes, agregó Crump.
Bien entrada la noche, la zona fue acordonada por la policía mientras los investigadores revisaban el lugar en busca deevidencia y los detectives recorrían puerta por puerta buscando información.