Alemania y Austria permitirán la entrada y/o el paso de los cientos de refugiados, en su mayoría provenientes de países en conflicto, que se dirigen en Hungría hacia la frontera austríaca, como una medida excepcional.
Así lo informó el canciller federal de Austria, el socialdemócrata Werner Faymann, tras haber hablado con su homólogo húngaro, Viktor Orbán, informó la agencia austríaca APA.
Caos en estaciones de tren en Hungría
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señaló que en las estaciones de trenes de Hungría se viven “escenas de caos” por el movimiento masivo de refugiados en tránsito hacia Austria y Alemania.
“La situación cambia cada hora y es muy tensa, con refugiados que rehúsan ir a los centros de recepción”, dijo en un comunicado Magdalena Majkowska-Tomkin, jefe de misión de la OIM en Budapest.
El pasado lunes 31 de agosto, el gobierno húngaro permitió a los refugiados que acampaban cerca de la estación “Keleti”, ubicada en la capital, tomar trenes hacia Viena, Austria, luego del hallazgo que hicieran autoridades austríacas de un camión con los cuerpos sin vida de 71 inmigrantes.
La decisión, sin embargo, fue cambiada el martes 1 de septiembre lo que generó la protesta de miles de personas que no pudieron emprender el viaje a pesar de haber comprado los boletos.
Al día siguiente, a los refugiados les fue permitido abordar un tren que no los llevó a la frontera con Austria, como era su deseo, sino a la ciudad húngara de Bickse en donde está ubicado un centro de acogida al que cientos de personas rehusaron inscribirse, por lo que pasaron la noche en un tren en la estación de la pequeña ciudad ubicada 40 kilómetros al este de Budapest.