“Y cuando asumes el pensamiento libre, crítico e independiente no percibes a la realidad como un hecho dado e inamovible incambiables sino como una situación contingente, resultado de situaciones humanas, quizás equivocadas, pero cambiables y entonces la crisis del país se vuelve algo posible de revertir,”, dijo Denise Dresser en su conferencia en la biblioteca magna de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN).
En las instalaciones de la biblioteca magna de la Universidad Autónoma de Nayarit se dieron cita estudiantes, docentes y administrativos universitarios además de público en general para escuchar la conferencia magistral de la doctora Denise Dresser con el tema “De la utopía a la realidad. Construyendo la Universidad que queremos” en la cual invitó a los universitarios a ser críticos y habló de temas controversiales como la corrupción, la legalización de la marihuana y la pederastia.
El presidente de la FEUAN Ángel Aldrete dio comienzo argumentando que los jóvenes ya no deben tener la idea de que estudiar es solo para conseguir un empleo bien remunerado, sino para ser los agentes de cambio que necesita nuestro país, motivo por el cual, dijo, se realizará este ciclo de conferencia. Fue así, como la politóloga Dresser dio comienzo con su conferencia.
Denise Dresser fue recibida con gran expectación y entre aplausos comenzó su plática recordando a los universitarios la importancia de ser críticos además de exhortarlos para lograr hacer que el país y la ciudadanía salgan del aletargamiento en el que se encuentran y hagan valer su opinión ante cualquier ente opresor. En ocasiones la conferencista arrancó risas y carcajadas con algunos de sus comentarios político-sociales, que obviaban las situaciones escandalosas de la política nacional y local.
“Quisiera comenzar recordándoles cuál es la labor del crítico, del buen ciudadano de una sociedad democrática, decir la verdad y avergonzar al Diablo, ser odiado por todos los bandos, sentarse frente a la pantalla o ante la computadora y ser amigo de nadie, desplegar la honestidad y el coraje para proteger a la sociedad, venga del gobierno, del sector privado o del crimen organizado, ser sensor implacable del poder, porque es la única manera de democratizar el ejercicio”, dijo.
“¿y cuál es ese Diablo al que hay que avergonzar cotidianamente en nuestro país?, es la impunidad, la corrupción, la complicidad, la decidía, el país donde no pasa nada, en donde hay muchos escándalos, pero muy pocas sanciones, donde siempre hay corruptos señalados, pero nunca corruptos encarcelados; y todo esto es normal, estos escándalos, las fallas no nos parecen indicio de catástrofes sino de continuidad, la pederastia protegida por la iglesia católica o la fortuna ilícita acumulada por un gobernador”, expresó.
“El oficio de ser joven universitario parte del compromiso de llamar a las cosas por su nombre, de descubrir la verdad aunque haya tantos empeñados en esconderla, de decirle a los corruptos que lo han sido, de decirle a los abusivos que deberían dejar de serlo, de no votar por alguien que dice que ha robado pero ‘solo poquito’, de mirar a México con la honestidad que necesita, demostrar que somos mejores que la clase política y que no tenemos el gobierno que merecemos”, remarcó.
Los cambios, argumentó Dresser, no son sólo aquellos que generan un cambio global sino las pequeñas acciones que se realizan día a día; por lo cual dio a los asistentes diez tareas que pueden realizar y ser parte del cambio que necesita el país: la lista contenía acciones como: leer, informarse de las problemáticas sociales y políticas, dar seguimiento a los trabajadores públicos, incentivar las candidaturas ciudadanas, oponerse a los monopolios, conectarse con otros, leer las noticias en medios alternativos, apoyar iniciativas de ley independientes ejemplificando con la iniciativa llamada “tres de tres”, atender la educación pública, ser voluntarios en asociaciones civiles, solicitar información al IFAI, etc.
A pesar de las situaciones adversas comentó la Dra. Dresser, “cuando pienso en México no solo pienso en los problemas que tenemos sino en todo aquello que me hace recordar la belleza que tiene nuestro país”, dijo finalizando así su charla de aproximadamente una hora y treinta minutos.
Para concluir se le entregó un reconocimiento por su participación en el ciclo de conferencias de manos de rector de la universidad y del presidente de FEUAN.