Las autoridades de Estados Unidos descubrieron el que consideran como el «narcotúnel» más largo entre México y California.
El túnel, que nace en una casa en Tijuana y desemboca en una zona industrial de San Diego, al otro lado de la frontera, mide unos 800 metros y su recorrido tiene forma de zigzag.
«Es ingenioso. Creo que es completamente diferente a lo que habíamos visto», dijo este miércoles Laura Duffy, fiscal del sur de California.
Lo más llamativo es su estrecha salida, que estaba cubierta por un cubo de basura.
El pasaje contaba con iluminación, ventilación, un sistema de raíles y hasta un ascensor con capacidad para 8 o 10 personas.
El descubrimiento dio también como resultado el decomiso de una tonelada de cocaína y de siete de marihuana.
Se trata del decimotercer túnel secreto encontrado en la frontera de California con México desde 2006.
La región de San Diego-Tijuana ofrece ventajas para la construcción de túneles debido a su suelo arcilloso, lo que facilita la excavación.