Le estoy dando un repaso capítulo a capítulo porque está muy bien resumido y además trae traducción de inglés a español.
Les cito tales capítulos por orden: 1.- Rosario y las Campanas de San Blas 2.- Virgen de Guadalupe 3.- Moros en España 4.- El romperse del Iglesia Católico (sic) 5.- Un hombre llamó a Blasius 6.- Encuentren el puerto de San Blas 7.- Expediciones de San Blas al Noroeste Pacífico 1774- 1779 8.- Por la Caída de España Nueva (sic) 9.- Los Virreyes de España Nueva (sic) 10.- Calendarios alineando Pascua 11.- La Una Campana de San Blas (sic) 12.- En el muelle de San Blas 13.- Huicholes y aztecas 14.- San Blas
En lo que el autor llama Sección 2: Islas de San Juan, los capítulos son: 15.- Rosario en el Noroeste Pacífico 16.- ¿Quiénes nombraron las cuatro islas principales de San Juan? 17.- Dónde consiguió don Juan Vicente sus Nombres 18.- Nuestra señora del Buen Viaje 19.- Las campanas de la Isla de San Juan 20.- La una campana de Rosario (sic)
Este libro debió haber sido escrito alrededor del año 2004 ya que incluye una breve alusión a los daños causados por el huracán “Kenna” que azotó San Blas en octubre del 2002. Lo que me encontré fue una tercera reedición del año 2007 y como he dicho, trae una traducción muy elemental, casi sin corregir, del inglés al español, como si los editores metieron el texto íntegro a un traductor digital, quizá en Google.
Para ejemplo de lo que Billington expone en el libro, sobre el capítulo 6.- Encuentren el puerto de San Blas, nos dice “San Blas comenzó como una aldea español civil en 1767 debido a las minas de sal a lo largo del camino de allí y de Tepic, capital de hoy del estado de Nayarit, cuarenta dos millas lejos (sic). Durante ese primer año, las tormentas inundaron San Blas, trayendo enfermedad y la evacuación a Tepic. La gente volvió al año siguiente.
Bajo orden del rey Carlos III de España, España Nueva debía establecer un centro naval del coste del oeste (sic), el 22 de febrero de 1768 el comando naval pacífico del este de España celebró la fundación oficial de la Fortaleza Basilio en Puerto de San Blas, Nayarit, también llamado San Blas del Californias (sic), debido a él que era elegido como el acceso principal al norte. Esta fortaleza debía proteger las expediciones españolas, naves de los misionarios (sic), y los comercios que navegaban al norte a los Californias y al oeste a los filipenses, de los piratas británicos y franceses”.
Otro párrafo narra que en marzo 12 de 1768 Fray Junípero Serra y el padre Francisco Kino navegaron con monjes franciscanos de San Blas, en una barca construida en la Bahía de Matanchén, barco llamado “La Concepción” que otros llaman “La Purísima” hasta la península de Baja, para sustituir a los jesuitas expulsados de misiones mexicanas en 1767.
Expediciones de San Blas al noroeste Pacífico
Billington nos dice que en 1774, Juan Pérez navegó al norte en el barco “Santiago”. En 1775, el capitán Bruno de Hezeta y Dudagoitia navegó en el “Santiago” al norte, con Juan Pérez como segundo a bordo. La segunda nave “Sonora”, de solamente once metros de larga en la línea de flotación, navegaba al mando de Francisco de la Bodega y Quadra. En 1779, dos naves enfilaron al norte, Bodega y Quadra en “La Favorita” y “La Princesa” al mando de Ignacio de Arteaga.
En 1788 don Estévan José Martínez y Gonzalo López de Haro navegaron al norte en “La Princesa” y el “San Carlos”. En 1789 Martínez y de Haro navegaron en esas mismas naves y lograron vencer tropas británicas, trayendo presos a San Blas de regreso. En 1779 tres naves fijaron la vela bajo el comando del teniente Francisco de Eliza de la fragata “Concepción”. Las otras dos naves, “Princesa” y “San Carlos” comandadas por Manuel Quimper y Salvador Fidalgo. Ellos negocian en la Convención de Nootka entre españoles y británicos.
Para concluir con este breviario sobre el libro de Historias y Leyendas de San Blas, del autor Marcos C. Billington, y sobe el mismo tema de las Expediciones al noroeste del Pacífico, dice que “en 1791 Francisco de Eliza esperó en Nootka en “La Princesa” la llegada de otras naves que venían de San Blas para mayo. Eliza esperaba la llegada de dos de sus naves, una el “San Carlos” con Ramón Saavedra al mando, y el “Santa Saturnina” también llamada “Horcasitas” bajo las órdenes de José María Narváez y de piloto Juan Carrasco. Eliza tenía órdenes de navegar más al norte pero los vientos restringieron el viaje, quedándose en donde ellos nombraron las Islas de San Juan.
Estas y otras crónicas referentes a la importancia del puerto de San Blas a finales del siglo XVIII se narran en este librito bilingüe que me encontré a la pasada en un estanquillo de baratijas.
Pretendo hacerles llegar la próxima semana otra serie de comentarios vertidos en este pequeño volumen de Marcos C. Billington.
La historia es de aquellos superhombres que desafiaban el peligro a lo desconocido, con apenas, madera, velas, viento y estrellas.