Uno de los momentos más esperados de los Grammy 2017 era la presentación de Metallica con Lady Gaga, misma que según la banda y la cantante iba a ser espectacular, pero lamentablemente terminó siendo un total desastre.
Fue en la interpretación de “Moth Into Flame” en la que James Hetfield, vocalista del grupo, comenzó con notorios problemas técnicos, ya que durante los primeros dos versos de la canción su voz no se escuchó en lo absoluto.
El músico continuó con lo suyo mientras esperaba a que se arreglara la falla pero conforme avanzaba el tema se vio obligado a acercarse al micrófono de Lady Gaga para así poder escucharse.
Al terminar la canción Hetfield se veía bastante enfurecido e incluso pateó el atril de micrófono, aventó su guitarra al ingeniero de audio e hizo una seña con los brazos para expresar su descontento.
Lady Gaga por su lado mostró un lado muy diferente al que nos ha enseñado anteriormente, sacando una esencia mucho más rockera y enloquecida, además de que lució su talento en los versos en los que le tocaron cantar.
Metallica estuvo nominado a Mejor canción rock por “Hardwired”, categoría que perdió ante “Blackstar” del fallecido y legendario David Bowie.