Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, dijo que están trabajando con la Fiscalía de Guerrero para esclarecer los hechos.
El sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada murió arriba de su camioneta y a manos de su chofer, informó Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México.
En la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, Harfuch dio avances de las primeras investigaciones del asesinato del sacerdote en Guerrero.
Harfuch dijo que ya colaboran con la Fiscalía del estado para dar con el chofer del sacerdote Pantaleón Estrada, que desapareció el 4 de octubre. Agregó que todavía no tienen un móvil del asesinato.
El lunes 6 de octubre, la Fiscalía del estado y la Diócesis Chilpancingo-Chilapa confirmaron la muerte del sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada, quien se encontraba reportado como desaparecido.
La Diócesis Chilpancingo-Chilapa emitió una esquela en redes sociales en la que confirmó el deceso del párroco de la comunidad de Mezcala, municipio de Eduardo Neri.
La víctima era originario de Cocula, municipio de la región norte de Guerrero, pero se desempeñaba como párroco en la parroquia de San Cristóbal.
Su cadáver, que presentaba varios impactos de bala, fue localizado a la altura del kilómetro 199 de la carretera federal México-Acapulco, entre Zumpango (cabecera municipal de Eduardo Neri) y el punto conocido como casa Verde.
¿Qué se sabe de la desaparición de Bertoldo Pantaleón Estrada?
La Diócesis de Chilpancingo-Chilapa informó sobre la desaparición del sacerdote de 58 años, quien se desempeñaba como párroco en funciones de la Parroquia de San Cristóbal en Mezcala, municipio de Eduardo Neri.
El lunes 6 de octubre, la Fiscalía del estado y la Diócesis Chilpancingo-Chilapa confirmaron la muerte del sacerdote Bertoldo Pantaleón Estrada, quien se encontraba reportado como desaparecido.
La Diócesis solicitó a las autoridades civiles activar el protocolo de búsqueda y localización del sacerdote.
En Guerrero se han registrado varios casos de violencia en contra de clérigos católicos, como es el caso del padre Joel Román Salazar de la diócesis de Ciudad Altamirano, fue asesinado en febrero del 2013.