Cárceles municipales, con bajas calificaciones por deficiencias: CNDH

Entre las deficiencias encontradas en los centros municipales figuran insuficientes actividades laborales y de capacitación para el trabajo

En una escala de cero a 10, las cárceles municipales obtuvieron calificación promedio nacional de 3.90, en las que sobresalen por sus deficiencias las de Nayarit, con 1.40 según el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2016.

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El documento, elaborado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) reveló que las cárceles municipales de Acaponeta, Rosa Morada y San Blas tienen una calificación inferior a un punto dentro de la escala en cuestión, que mide las condiciones mínimas que deben existir en un penal para garantizar una estancia digna y segura, capaz de lograr la reinserción social de los internos.

Entre las deficiencias encontradas en los centros municipales figuran insuficientes actividades laborales y de capacitación para el trabajo y falta de separación entre procesados y sentenciados.

Además, continúa la carencia de reglamentos y manuales, escasa o nula difusión de la normatividad, falta de áreas médicas, medicamentos y profesionales de la medicina, inexistencia o insuficiencia de instalaciones necesarias para el funcionamiento de esos centros, así como de acciones preventivas para atender incidentes violentos.

La CNDH comprobó también la persistencia de sobrepoblación, hacinamiento, autogobierno/cogobierno, falta de prevención y atención de incidentes violentos en centros estatales, así como anomalías en la separación entre procesados y sentenciados.

Otras irregularidades encontradas son condiciones materiales, equipamiento e higiene en áreas de dormitorios, sancionados, sujetos a protección, cocina y comedores, y la falta de personal de seguridad y custodia.

Se informó que para la elaboración del diagnóstico, la CNDH tomó como base la normatividad nacional e internacional en la materia, que establece la obligación de las autoridades de respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de las personas privadas de la libertad.

Entre los objetivos del diagnóstico está orientar las políticas públicas tendientes a garantizar el respeto de los derechos humanos de los internos, por lo cual se estructura para reflejar las condiciones por la que transitan las cárceles del país.

Ello, a través de un análisis cualitativo y un punto de vista cuantitativo, que identifique deficiencias y logros, los cuales sirvan de parámetros para establecer procesos de mejora en las instituciones de reclusión.

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