¿Cómo se logra hacer un cambio de estilo radical sin dejar de ser uno mismo? ¿Qué consecuencias trae un cambio drástico de apariencia? Dos asesores de moda y un psicólogo nos ayudan a dilucidarlo

Dejó a todos con la boca abierta. Nicole Moreno, más conocida como Luli, la misma figura farandulera que salía en programas por sus escándalos y escasa ropa, dio un giro absoluto en su estilo hace algún tiempo, que coronó en estos días con una portada en revista Paula, donde se vio elegante y sofisticada.
Su transformación ha dado que hablar, tal como lo hicieron en su minuto Dominique Gallego, la ex chica reality que se bañaba en topless y que se sofisticó para ser rostro de Canal 13, y Karen Bejarano, que pasó de ser una chica Mekano a depurar su estilo en el matinal “Mucho Gusto” de Mega.
Pero, ¿cómo se logra hacer un cambio de estilo radical? ¿Qué consecuencias trae? Dos asesores de moda y un psicólogo nos ayudan a dilucidarlo.

Un cambio paulatino
Para Fernando Marchant, psicólogo de Vidaintegra, lo más importante en estas transformaciones es que “uno tiene que lograr cierta coherencia entre lo que se es y el cambio que se quiere hacer. Si pasas de un extremo a otro, el cambio termina por alejarte de tus raíces”.
Sin embargo, el especialista advierte que “eso no quiere decir que uno no pueda acudir a cambios que ayuden a mejorar en lo físico o visual para verse mejor, porque esto también ayuda a nuestra autoestima. Pero si te enfocas solo en lo externo y haces cambios de estilo muy visuales, éstos se pueden desarmar fácilmente, porque están sujetos a la crítica y la evaluación externa”.
Es por esto que, Marchant recomienda que “si se quiere hacer un cambio, éste tiene que ser paulatino. La idea es evitar que de la noche a la mañana aparezca de otra forma, porque va a parecer un disfraz”.

¿Cómo hacerlo?
Para Javier Fernández, estilista y asesor de imagen, los cambios de estas famosas tienen que ver con “una tendencia que va hacia lo cómodo, lo simple y más natural. Luli, por ejemplo, dejó de lado su rubio platinado por un castaño, y su bronceado extremo por una piel más limpia”.
El ex panelista del programa de CHV “Maldita Moda” aconseja que “mientras menos artificial te veas, más joven te ves”, y que si se quiere estar al día de las tendencias “miren la biblia que es Vogue, donde pueden encontrar ideas y looks, y las más jóvenes que se vuelquen a Instagram, donde están todas las fashion bloggers que la llevan”.
En tanto, Carola Montenegro, asesora de imagen y personal shopper, dice que la clave principal para lograr un cambio radical es “depurar un poco el mismo estilo. Bajar el color de la tintura ( 1 o 2 tonos), si vas al solárium no ir más y optar por limpieza de piel y mantenerla lo más sana posible. Eliminar el rucio casi blanco y las mechas californianas”.
Además, aconseja que “en cuanto a la vestimenta, la idea es usar menos accesorios. Darle importancia a uno y que no compitan entre sí. Y comprarse ropa de buena calidad y clásica, más que fijarse en lo que impone la moda”, finaliza.