Hoy más que nunca debemos reforzar nuestra higiene en casa y fomentar el uso de cubre bocas al salir de ella. Para evitar gastar mucho presupuesto en cubrebocas desechables, la opción son aquellos que puedes usar varias veces y ante esto, hoy te vamos a revelar como desinfectar una mascarilla reutilizable.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EU recomiendan usar aquellos que son de tela para salir a la calle y usarse en espacios públicos con gran afluencia de personas.
Estas máscaras de tela, garantizan el abasto a médicos y personal del sector salud de aquellos cubrebocas quirúrgicos y respiradores N-95, que en fechas recientes se han agotado de farmacias y han encarecido en sus costos.
Hay innumerables formas de hacer tus propias mascarillas para evitar el contagio por Covid-19. Sin embargo, un paso crucial para mantenerse protegido es asegurarse de desinfectar eficazmente el cubrebocas después de cada uso.
Por ello, a continuación, te compartimos tres métodos aprobados por expertos para desinfectarlos adecuadamente:
1. Lava en lavadora
Si tienes una lavadora y una secadora disponible, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades dicen que una lavadora normal debería hacer el trabajo de desinfectar tus cubrebocas.
Asegúrate de lavar tu cubrebocas después de cada uso en una bolsa para ropa delicada y así evitar que el elástico se desprenda. Lávala con detergente para ropa y agua caliente o con un desinfectante. Luego, deja secarla en la secadora a temperatura alta. Este mismo método también funcionaría para otros revestimientos de tela como pañuelos o bufandas.
2. Desinfecte el cubrebocas con una plancha
Además de darles una mejor vista, puedes desinfectar aquellos de telas no inflamables mediante la opción de calor seco.
3. Lavar a mano
Al no tener acceso a una lavadora, también puedes desinfectar su cubrebocas de tela en el fregadero de la cocina. Llénalo con agua muy caliente y jabón para platos.
Deja que la mascarilla se remoje en agua jabonosa caliente durante al menos cinco minutos. Asegúrate de dejar que se seque por completo antes de volver a usarlo.