Un panadero cristiano de Colorado, Estados Unidos, compareció este lunes en una audiencia virtual ante un juez de Denver tras haber sido demandado por negarse a hornear un pastel para festejar la transición de género de una potencial cliente.
Se trata de Jack Phillips, propietario de la pastelería Masterpiece Cakeshop, quien ya en 2012 fue demandado por negarse a hacer un pastel de bodas para una pareja gay. La Comisión de Derechos Civiles de Colorado determinó que su conducta fue discriminatoria.
Phillips apeló y el caso llegó a la Corte Suprema de Estados Unidos en 2018. En aquella ocasión, los ministros dictaminaron que la Comisión mostró un sesgo antirreligioso cuando sancionó a Phillips, pero no se pronunciaron sobre el tema más amplio de si las empresas pueden invocar objeciones religiosas para negarse a prestar servicios a la comunidad LGTB.
La audiencia del lunes se refiere a una nueva demanda presentada en 2017 por la abogada transexual Autumn Scardina, quien llamó al negocio de Phillips para solicitarle un pastel personalizado, rosa por dentro y azul por fuera, para reflejar su transición de género, a lo que se negó el propietario de Masterpiece Cakeshop.
Un detalle adicional es que Scardina llamó al negocio para encargar el pastel justo el mismo día que la Corte anunció que atendería la apelación de Phillips contra el fallo de la Comisión de Colorado por el caso de la boda gay de Charlie Craig y Dave Mullins, celebrada en 2012.
La audiencia
El lunes, durante el juicio virtual, Scardina dijo que Phillips había sostenido que, como cristiano, se oponía a hacer el pastel de bodas de la pareja gay porque implicaba una ceremonia religiosa, pero que le vendería cualquier otro tipo de producto.
Scardina reconoció que llamó a la pastelería de Phillips para hacer el pedido después de escuchar el anuncio de la Corte. Su abogada, Paula Greisen, negó que se tratara de un montaje, sino que más bien lo hizo “como para llamar la atención de alguien».
De acuerdo con la agencia Associated Press, el abogado de Phillips argumentó que su cliente se negó a hacer el pastel por el mensaje que implicaba y no por discriminación a Scardina.
Con Phillips recibiendo la atención de los medios desde el caso de la boda gay de 2012, no podía crear un pastel con un mensaje con el que no estaba de acuerdo, alegó Gates.
“El mensaje sería que él está de acuerdo en que una transición de género es algo que se debe celebrar”, dijo Gates, quien aseguró que Phillips también se ha opuesto a hacer pasteles de Halloween y otras creencias que rechaza.
En el caso anterior, cuando se negó a hornear el pastel de la pareja LGTB, “la Comisión prosiguió el caso, pero lo abandonó en 2019 después de que Phillips presentó una demanda federal contra el estado”, informó Wall Street Journal.
Cambio de argumento
Según AP, los abogados del estado y Phillips acordaron dejar ambos casos bajo un acuerdo que aún le permitía a Scardina demandar por su cuenta, aunque, afirma The Wall Street Journal, la abogada cambió los motivos de su queja.
En su queja original ante la Comisión, Scardina escribió que le había dicho a la panadería que el diseño era para celebrar su transición de hombre a mujer y luego le pidió hacer un segundo pastel con la forma de Satanás fumando un porro. Después alegó que pidió un pastel de cumpleaños, no uno para celebrar su transición de género, pero Phillips le negó el servicio porque ella es transgénero.
Al cuestionarle por qué la petición de Satanás y el porro en el pastel, Scardina argumentó que su intención era persuadir a Phillips de hacerle ver “sus errores de pensamiento”.
Phillips declinó la petición de Scardina y ella se quejó de inmediato ante la Comisión de Derechos Civiles de Colorado, la cual había sancionado a Phillips por el caso de la boda gay de 2012, aunque después la Corte Suprema determinó que dicha instancia tuvo un sesgo antirreligioso con esa decisión.
De acuerdo con The New York Times, para evitar que se repitiera lo sucedido, Phillips dejó de vender pasteles de boda por completo, mismos que eran su especialidad, provocándole una caída del 40% en su negocio.
“Jack está siendo atacado por sus creencias religiosas. Sus oponentes están armando la ley para castigarlo y destruirlo porque no creará expresiones que violen su fe cristiana. Quieren hacer de la ley un brazo de la cultura de la cancelación”, aseguró la representante de Phillips, Kristen Wagoner, de Allianse Defending Freedom.
“Jack no descartó a Scardina por ser transgénero. No hornearía pasteles con esos mensajes para nadie” ni siquiera los hace con los temas de Halloween, aseveró Wagoner, para quien está claro que los activistas persiguen a Phillips y lo acosan porque es un cristiano conservador, pidiéndole pasteles con figuras o imágenes que rechazará.
“Jack Phillips de Masterpiece Cakeshop está siendo demandado por discriminación anti-LGTB. Otra vez. @BecketAdams pregunta ¿hay un solo panadero en Colorado?”
Un usuario respondió a esta publicación en redes sociales que quien lo demanda es la abogada transexual Autumn Scardina, que la presentó una hora después de que se dictó el fallo favorable a Masterpiece. “Por lo menos es una interferencia negligente y tortuosa por parte de Scardina”, indicó.