Al clamor de ¡Hay que cuidar el agua!, dos mil 200 niños y jóvenes conformaron los Guardianes del Agua en San Vicente, con la finalidad de promover, fomentar y difundir entre los habitantes la cultura del cuidado del vital líquido.
Correspondió al presidente municipal de Bahía de Banderas y presidente de la Junta de Gobierno del Organismo Operador Municipal de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (OROMAPAS), José Gómez Pérez, tomar la promesa a los alumnos de jardines de niños, de escuelas de primaria, secundaria, y de nivel medio superior, que se congregaron en la plaza pública del poblado de San Vicente.
“Les pregunto: ¿Prometen cuidar y proteger el agua, que nadie haga mal uso de ella en la casa, en la escuela, o en la comunidad, ser vigilantes y promotores de su buen uso, porque el agua es salud y bienestar?”, les cuestionó el primer edil a los niños y jóvenes en la plaza pública de San Vicente.
La respuesta de los interrogados no se hizo esperar, y con su mano al frente respondió cada uno en coro: “Sí prometo”.
Previo a la toma de protesta, madres de familia, educadoras y maestros de más de 20 centros de educación del municipio desfilaron con los niños y jóvenes, acompañando al Alcalde José Gómez Pérez, al director del organismo Juan Gabriel Ávalos Lemus, al delegado municipal de San Vicente Alejandro Palomera Ochoa, al presidente del ejido de San Vicente Guadalupe Flores García, y al regidor de la demarcación Cristóbal Esparza García.
Juan Gabriel Ávalos Lemus, director del OROMAPAS, informó que gracias al apoyo de padres de familia y de maestros de las distintas escuelas del municipio, la entidad ha logrado llevar su mensaje del cuidado del agua a los niños y a los jóvenes en los diversos poblados del territorio.
“Al interior de cada una de las escuelas se ha trabajado con algunas actividades como pancartas, como cuadros sinópticos, algunas actividades lúdicas, que ayudan a que los niños vayan teniendo consciencia de lo que es el cuidado del agua”, comentó.
Finalmente, el Alcalde José Gómez Pérez, admitió que el agua es un bien gratuito, que es de todos, pero que hacerla llegar a cada una de las viviendas, cuidarla para que no se acabe, y darle un tratamiento final una vez que ha sido usada, eso sí cuesta. Por ello pidió el apoyo y la comprensión de todos, para participar en la guarda y en el cuidado del vital líquido.