Debido a trabajos de reparación, el famoso reloj británico estará parado durante un máximo de cuatro meses; las obras iniciarán en 2017
Las campanadas del Big Ben dejarán de sonar durante unos meses coincidiendo con la restauración de la deteriorada torre del reloj del Parlamento británico, que durará tres años, explicaron autoridades.
Los trabajos -que comenzarán en enero de 2017 y tendrán un coste de 29 millones de libras (42 millones de dólares)- son la mayor reparación que se efectúa en la torre en décadas.
Entre otras cosas, se detendrá la filtración de agua que amenaza con derrumbar la mampostería de la icónica torre de 160 años.
El gran reloj de la torre estará parado durante un máximo de cuatro meses, y la enorme campana del Big Ben dejará de dar las horas durante otra fase de las obras.
Steve Jaggs, el responsable del reloj, prometió el lunes que las campanas del Big Ben repicarán para recibir el año nuevo a pesar de la restauración.