Fidel Castro se reunió con el papa Francisco en un encuentro privado e informal, en la residencia del comandante y que duró entre 30 y 40 minutos.
El vocero del Papa, Federico Lombardi, informó de la reunión que se efectuó después de la misa de Francisco en la Plaza de la Revolución.
El Papa primero fue a la Nunciatura y después a casa de Fidel Castro, quien lo recibió con su esposa, Dalia Soto del Valle, sus hijos y nietos.
El Pontífice le regaló cuatro libros y dos CD con las palabras del jesuita Armando Llorente, tutor de Fidel Castro. Entre los obsequios estaban dos libros de Alessandro Pronzato, experto en catequesis, en la Biblia y divulgador teológico, uno de ellos titulado Evangelios molestos y otro llamado La boca que nos llenó de risas, sobre la relación entre humor y religión.
También le regaló ejemplares de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium y su encíclica sobre temas medioambientales Laudato si.
El expresidente cubano le obsequió al Papa el libro Fidel y la religión, la entrevista que el teólogo brasileño Frei Betto le hizo al comandante en 1985, y le escribió una dedicatoria:
“Para el papa Francisco en ocasión de su fraternal visita a Cuba. Con admiración y respeto del pueblo cubano”.
Al Papa lo acompañó una comitiva pequeña de no más de 15 personas, como el nuncio en Cuba, Giorgio Lingua.
Y según Lombardi, durante el intercambio informal hablaron de las preocupaciones del Papa en el mundo, como la pobreza, la exclusión y el deterioro del medio ambiente.
El vocero recordó que cuando vino Benedicto XVI, el diálogo se dio más a manera de preguntas de Fidel al Papa, y en esta ocasión fue una conversación fluida por el idioma español.