El jefe de la Sección de Intereses de Washington en la isla entrega una carta del presidente Barack Obama a su par cubano, Raúl Castro, donde se anuncia la fecha
Cuba y Estados Unidos reabrirán embajadas a partir del 20 de julio, un hito en las tensas relaciones entre ambas naciones geográficamente vecinas pero distanciadas en lo político.
La cancillería cubana dio a conocer la fecha el miércoles en un comunicado luego de informar que el jefe de la Sección de Intereses de Washington en la isla, Jeffrey DeLaurentis, había entregado una carta del presidente Barack Obama a su par isleño, Raúl Castro.
La misiva confirma la decisión de restablecer las relaciones diplomáticas entre los dos países y abrir misiones diplomáticas permanentes en las respectivas capitales, a partir del 20 de julio de 2015, expresó.
La carta fue recibida por el ministro interino de Relaciones Exteriores Marcelino Medina en una sala de la cancillería que lucía de fondo las banderas de los dos países.
Se permitió a los fotógrafos tomar imágenes del momento pero no se difundió el contenido completo de la misiva.
Ambos gobiernos decidieron restablecer sus relaciones diplomáticas en diciembre como un primer paso hacia la normalización de las relaciones totales, que incluirían el levantamiento de las sanciones contra la isla que llevan más de cincuenta años.
Por su parte el presidente Barack Obama informó que anunciará este mismo miércoles que Estados Unidos y Cuba llegaron a un acuerdo para abrir sus respectivas embajadas en Washington y La Habana, dijo un alto funcionario del gobierno estadunidense.
Para Obama terminar con el distanciamiento con Cuba es un elemento primordial de su legado en política exterior al acercarse el final de su mandato.
El mandatario pregonó durante mucho tiempo el valor de las relaciones bilaterales y alegó que el embargo comercial de Estados Unidos sobre la isla comunista ubicada a sólo 145 kilómetros de Florida no era efectivo.
El funcionario que dio a conocer la noticia del anuncio de Obama insistió en mantener el anonimato debido a que no estaba autorizado a discutir públicamente el asunto antes que el presidente.