El arquitecto húngaro Erno Rubik, creador del famoso cubo que lleva su apellido, el cual ideó para explicar la geometría y las formas tridimensionales, pero que es considerado un hallazgo en el mundo de los rompecabezas y los juegos en general.
Es un rompecabezas, una metáfora y un popular juguete.Rubik, un arquitecto, daba una clase en la Escuela de Artes Aplicadas de Budapest en 1974 cuando decidió construir un cubo para enseñar a los estudiantes sobre el espacio en tercera dimensión.
Pronto se dio cuenta que podría convertirse en un exitoso juguete cuando los estudiantes y colegas no lo podían soltar.
Lo comercializaron masivamente en Occidente en 1980 y ha sido un éxito perdurable con más de 500 millones de cubos vendidos en todo el mundo, sin contar las falsificaciones, de acuerdo con Rubik.
Rubik insiste en que más que inventarlo, “descubrió” el cubo.
“En mi opinión, es parte de la naturaleza, y no es un objeto artificial, es algo natural”, señaló.
Una de las características de la exposición es una versión con incrustaciones de diamantes creado por Fred Cuellar, el fundador de Diamond Cutters International, una compañía que fabrica anillos de campeonato de la NFL y otras joyas de gran presencia.
“Mi padre puso un Cubo de Rubik en mi mano y me acuerdo de mirarlo y pensar ‘Dios, me siento bien’. No podía explicarlo “, dijo el joyero.
“Usted puede aprender (a resolverlo). Se puede aprender de otras personas, se puede aprender de los libros, se puede aprender de diferentes notas y explicaciones en internet, pero lo mejor es si encuentra su propia solución”, dijo.