Durante el embarazo y el post parto surgen muchas dudas en torno a la maternidad, principalmente si se trata de madres primerizas. Una de los temas que más cuestionamientos genera es la lactancia materna. Esta etapa suele ser una de las etapas más hermosas para cualquier madre, pero también puede ser muy difícil para otras, ya que se pueden presentar ciertas complicaciones como dolor, resequedad y grietas en los pezones, lo que a la larga puede provocar sangrado.
Muchas mujeres sienten dolor al amamantar a sus bebés, en algunas de ellas las molestias se presentan sólo al inicio y después desaparecen, mientras que en otras persisten. En este último caso lo más conveniente es consultar a un especialista.
En otros de los casos estas molestias pueden estar ocasionadas porque el bebé está colocado en una posición incorrecta para ser amamantado, por lo que se soluciona colocando al bebé en la posición adecuada y no optando por dejar de dar pecho de inmediato.
Si ya se ha colocado al bebé de forma correcta y se le está alimentado de manera adecuada y las molestias persisten, algunas de las posibles causas serían:
Síndrome de Raynaud
El dolor se presenta de modo muy intenso produciendo una mala circulación de sangre y afectando el pezón o sólo la punta, en principio de aspecto pálido y rubor ante la falta de riego sanguíneo en la punta. No prestar atención al síndrome de Raynaud puede llevar a la aparición excesiva de grietas y ampliar los problemas hasta originar mastititis.
Obstrucción mamaria
Se presenta cuando algún conducto de la glándula mamaria se encuentra obstruido generalmente en un sólo pecho. La leche queda atorada teniendo así leche retenida ocasionando bultos rojos, dolorosos y calientes en alguna parte del pecho. Algunas formas de curar la obstrucción mamaria consisten en la aplicación de trapos calientes en la zona de enrojecimiento, masajear la zona en dirección al pecho con movimientos circulares y tener control sobre el colesterol en la sangre con un complemento dietético , lecitina de soja.
Mastitis
Es un problema más grave durante la lactancia o incluso llega a presentarse en el embarazo, al ser una infección en la zona de tejido mamario. Es un dolor que se presenta en gran escala y con la aparición en mucha ocasiones de pus, produciendo una acumulación excesiva de leche, además de la aparición de fiebre mayor a los 38.5° . Algunos puntos de prevención es consumir antioxidantes, vitamina E, A y logrando el riesgo de contraer una inflamación y evitar estar bajo estrés y traumatismos.
Candidiasis de pezón
Se trata de una infección a base de hongos y calificada como una enfermedad con algún grado de dificultad para curarse. Se presenta con dolor intenso, ardor , mucha sensibilidad y comezón en el pezón pero que puede controlarse y seguir y completar la etapa de lactancia para el bebé teniendo muchos hábitos de higine como lavarse las manos antes de cambiar los pañales, esterilizar adecuadamente las tetas, pezoneras y juguetes y amamantar mientras del pecho donde se presente menos dolor.