Luego de 10 años de matrimonio, Kellie Chauvin, esposa del expolicía de Minneapolis, Derek Chauvin, solicitó el divorcio luego de que su esposo, presuntamente, asesinara a un hombre afroamericano tras no medir su fuerza durante un arresto.
Kellie aseguró sentirse “devastada” por la muerte de George Floyd informó el despacho de abogados que la representa, Sekuela Law Offices.
El bufete legal destacó que la mujer “envió sus condolencias a los familiares, seres queridos y a todos quienes están de luto” por el fallecimiento de Floyd; además, pidió que tanto ella, como sus hijos y familia, así como la de Derek Chauvin “tengan seguridad y privacidad”, pues atraviesan un “momento difícil”.
A través de un comunicado de prensa, la representación legal de Kellie Chauvin detalló que los hijos de la otrora ganadora del certamen de belleza Señorita Minnesota “no son producto de su matrimonio actual”, por lo que reiteraron la necesidad de garantizar su seguridad y respeto.
La solicitud de divorcio se dio en la víspera de la detención de Derek Chauvin, de 44 años, por la Oficina de Aprehensión Criminal de Minnesota, quien aseguró que el hombre había sido arrestado en Minneapolis, desmintiendo así que hubiera huido a Florida.
Por su parte, el fiscal del condado de Hennepin, Mike Freeman, anunció el día del arresto que sería acusado de asesinato en tercer grado y homicidio involuntario.