Con Visión Ciudadana
Desde hace mucho tiempo, Andrés Manuel López Obrador, ha sido la imagen de la oposición, previo a la elección de 2006, todavía como Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, un mucho más joven Andrés Manuel, tomaba un gran número de acciones no vistas en un gobernante, desde sus conferencias de prensa al iniciar el día, hasta sus viajes en un vehículo austero, la imagen en aquel entonces era para muchos la de un héroe, luego vino una campaña donde esa imagen se difuminó bastante, hasta el punto en que la duda razonable aún no sale del corazón y mente de muchos mexicanos, con los meses, años y después su segundo intento, aunque no tan fuerte como la primera vez, Andrés Manuel retomó la imagen de héroe opositor, pero al igual que en el primer intento no logró su cometido, aun conociendo lo anterior, para esta tercer postulación, mucho ha cambiado del Segundo Andrés Manuel de 2011-2012 y mucho más del AMLO de 2005-2006.
Muchas cosas para bien cabe reconocer, pero existen otras tantas, que hacen pensar que el héroe ha estado demasiado tiempo en el ring, por momentos pareciera que el deseo de ganar y de hacer lo correcto, con la consecuente frustración de no alcanzar la meta, han llevado a AMLO a adoptar acciones y medidas que no lo caracterizaban y que difícilmente empatan con el héroe anticorrupción y anti sistema que sus más fervientes seguidores insisten en defender, entre otras, cabe resaltar que continua aceptando a cuanto personaje de cualquier partido decida unírsele, sin importar, historial, cargo o acusaciones previas, la aparente suma de Elba Esther Gordillo a través de familiares muy cercanos y de Napoleón Gómez Urrutia, ambos personajes con un extremadamente cuestionable historial o su pacto total con el Partido Encuentro Social, agrupación política cuya plataforma choca de manera muy frontal con la mayoría de propuestas e ideas liberales que ha venido impulsando desde hace mucho, en fin, hay personas que piensan que el héroe que vendría a cambiar el sistema, ha competido lo suficiente para convertirse en villano.
A pesar de lo anterior, AMLO aún es el claro favorito para que la tercera sea la vencida, habrá que ver en caso de que gane, como se desempeña, pero por parte de quien escribe estas letras y de muchos millones de mexicanos, tiene por lo menos el beneficio de la duda y es que después de la montaña rusa que hemos vivido en últimos años, pareciera que nada podría ser peor, pero una cosa si es segura, AMLO sigue siendo un tema profundamente polarizador, un candidato y si todo sigue igual un Presidente que deberá probar que sigue siendo el héroe anti sistema y anti corrupción que una gran parte de personas en el país aún creen que es, la moneda está en su cancha.