Sus padres fueron arrestados en la base militar de Fort Drum, cerca de la frontera con Canadá, y después la pareja fue enviada a un centro de detención del ICE
Perla Silva, hija de una pareja de mexicanos detenidos la semana pasada en una base militar de Nueva York por agentes estadunidenses de inmigración, imploró en un video para que las autoridades liberan a sus progenitores y permitan que su familia permanezca unida.
En un video difundido por el grupo civil Se Hace Camino Nueva York, Silva expresó que sus padres, Concepción y Margarito Silva, tienen una condición médica seria, por lo que urgió a su liberación.
“Nuestra familia está devastada por lo que sucedió. Estamos muy preocupados por mi madre y mi padre, que tienen problemas de salud graves”, dijo Silva.
Añadió: “mi padre es el único padre que mi hija ha conocido. Ella lo extraña mucho. Por favor, ICE (Oficina de Inmigración y Aduanas), haz lo correcto para mí y para mi familia. Les pedimos que vengan a casa seguros”.
Concepción y Margarito Silva fueron detenidos cuando se disponían a celebrar con su yerno y otra de sus hijas la fiesta de independencia estadunidense del 4 de julio, y fueron sometidos a proceso de deportación luego de que las autoridades determinaran que no contaban con documentos migratorios.
El arresto sucedió en la base militar de Fort Drum, cerca de la frontera con Canadá, y después la pareja fue enviada a un centro de detención de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) ubicada en la ciudad de Buffalo, según confirmó a Notimex el Consulado de México en Nueva York.
La pareja, que había vivido en Estados Unidos durante más de dos décadas, había visitado antes a su yerno en la base de Fort Drum, para lo que habían empleado de manera regular una identificación que provee la ciudad de Nueva York a todos los residentes, sin importar su condición migratoria.
En esta ocasión, sin embargo, las autoridades solicitaron una segunda identificación, por lo que la pareja mostró sus pasaportes mexicanos, lo cual llamó la atención de un funcionarios de la base militar, que llamó a los agentes de ICE y de la Oficina de Protección de Fronteras (CBP).