Hillary Clinton dijo que se encaminaba a la victoria en la elección presidencial de 2016 hasta que la interferencia de hackers rusos y del director del FBI James Comey alejaron a potenciales votantes.
En sus comentarios más extensos desde la derrota ante Donald Trump en la elección del 8 de noviembre, Clinton dijo en una conferencia en Nueva York que sufrió un duro golpe con la carta de Comey al Congreso a fin de octubre, en la que informó que el FBI había reabierto la investigación sobre el uso de un servidor privado de correos electrónicos cuando era secretaria de Estado.
Agregó que la publicación de WikiLeaks de emails de su jefe de campaña John Podesta, supuestamente robados por hackers rusos, fue otro revés para sus aspiraciones.
“Si la elección hubiera sido el 27 de octubre, yo sería su presidenta”, dijo Clinton. “No fue una campaña perfecta, pero me encaminaba a la victoria hasta la combinación de la carta de Comey y el WikiLeaks ruso (…) La razón por la que creo que perdimos es por esos eventos en los últimos 10 días”.
Clinton también dijo que la misoginia jugó un rol en su derrota y remarcó que no tiene dudas respecto a que el presidente ruso, Vladimir Putin, trató de influenciar la elección para que Trump ganara. “Estuvo claro que interfirió para dañarme y favorecer a nuestro oponente”, explicó.
La ex primera dama, además, criticó a Trump al sostener que debería estar menos tiempo tuiteando y más enfocándose en su trabajo. También sostuvo que seguirá activa en cuestiones públicas. “Vuelvo a ser una ciudadana activista, y parte de la resistencia”, señaló.