Si yo tuviera un perro como ese, no seguiría soltero…
Cuando hacemos algo bueno por los demás, a veces la vida nos devuelve ese favor. En este caso, un hombre alimentó a un perro de la calle, pero no fue la vida quien se preocupó de recompensarlo, sino su mismo amigo de cuatro patas. Este divertido video te hará darte cuenta que ayudar a alguien sólo trae cosas positivas:
¡Guau!