Hoy rendimos honor a un hombre de Estado, al doctor Lucas Vallarta Robles, quien dejó profunda huella en su forma de hacer política, de militancia clara y firme; tendió puentes con polos ideológicos privilegiando siempre el acuerdo a la imposición, el diálogo al monólogo y la escucha a la propia voz”, expresó el presidente del Congreso, diputado Leopoldo Domínguez González, durante el homenaje póstumo ante familiares, amigos, diputadas y diputados de la actual Legislatura, al ex presidente de la Cámara de Diputados, José Lucas Vallarta Robles.
“Apasionado en todo lo que emprendió: la vida profesional, luego la sindical, la militancia partidista, la administración pública y los cargos de elección popular, destacó como presidente municipal de su querido Santiago Ixcuintla, donde se le recuerda con afecto”.
“Fue un hombre de servicio y un crítico de quienes en el ejercicio del poder sufrían cambios de personalidad que les hacían confundir el fin de la política (algunos cambian con sólo ocupar la presidencia de la mesa de debates de una modesta asamblea, solía decir). Fue guía de generaciones de sus contemporáneos y de jóvenes que después destacarían en la administración pública o en la lucha electoral”, refirió Domínguez González.
Al concluir, hizo hincapié en que “cuando parte un hombre de la talla del doctor Lucas Vallarta Robles, la pérdida se extiende al estado al que sirvió. Sin duda hoy Nayarit reconoce los servicios prestados por Vallarta Robles, la Trigésima Segunda Legislatura honra su memoria, honra su legado”.
Su hijo José Lucas Vallarta Trejo expresó tener más cosas que decir de lo doméstico, de lo personal, que de lo político; a su vez agradeció a la actual legislatura por tal homenaje: “a Lucas Vallarta se le reconoció como gran conciliador de la política, gran artífice de la democracia; su honradez política y su mano amiga fueron características y lo convirtieron en el hombre ejemplar”.
En este homenaje se contó con la presencia de representantes populares de las legislaturas XXIII, XXVII y XXX.