Estamos acostumbrados a escuchar sobre los efectos negativos de la ansiedad en nuestra vida cotidiana, tanto al relacionarnos con los otros como al enfrentar situaciones en nuestros trabajos o en la vida familiar.

De este mismo modo, la ansiedad no sólo afecta nuestras relaciones de pareja, sino que tiene una fuerte relación con nuestra vida sexual y puede afectarla de distintas maneras. Por ejemplo, al impedirnos alcanzar el orgasmo.

De acuerdo con Laurel Steinberg, doctor en psicología e investigador sobre el tema en la Universidad de Columbia, la ansiedad repercute cuando las personas intentan conectarse con sus parejas.

1) Te impide alcanzar el orgasmo

La ansiedad afecta fuertemente tu vida sexual y muchas veces impide que alcances el orgasmo, pues estás intranquila. Sin embargo, también afecta tu lubricación y te impide sentirte satisfecha, por lo que inhibe tus orgasmos.

En casos más difíciles incluso provoca que la penetración sea dolorosa, pues la ansiedad puede provocar que los músculos de tu vagina se encuentren tensos y apretados.

2) Disminuye tu deseo sexual

La ansiedad te quita el deseo sexual, y aunque tú no tomes la iniciativa, en muchas ocasiones provoca que no tengas ánimo para un encuentro sexual. En ocasiones esto también puede relacionarse con algunos tratamientos psiquiátricos, que te ayudan a estar más tranquila, pero te quitan apetito sexual.

3) Evita que te sientas cómoda con tu cuerpo

Las personas que padecen de ansiedad son más propensas a poner atención en las partes de sus cuerpos que no les gustan y a obsesionarse con ellas. Muchas veces quienes tienen ansiedad se sienten inseguros con su cuerpo y eso les impide disfrutar plenamente de su sexualidad.

4) Te lleva a aislarte y alejarte de los otros

La ansiedad te lleva a querer estar sola y a alejarte de los demás, esto provoca que quieras evitar conocer a otras personas, o incluso alejarte de tu pareja si la tienes. En ocasiones evitar el sexo también puede relacionarse con traumas del pasado.

5) Hace que te sea más difícil hablar de tus fantasías

Por último, si padeces de ansiedad es muy común que tengas miedo de hablar abiertamente de tus fantasías y de tus preferencias, lo que únicamente desencadena una mayor ansiedad por no poder hablar de lo que te gusta.