Matar gays en California podría ser legal

Para el inmigrante mexicano Fernando Ortega, la propuesta de matar legalmente en California a los homosexuales, de acuerdo con una iniciativa registrada oficialmente, es tan absurda que resulta difícil imaginar que pudiera aprobarse, pero no por eso deja de ser ofensiva.

“Así como hubo alguien que la presentara y registrara oficialmente para llevarla a los electores, lo peor de la sociedad en California va a ver en esa iniciativa la oportunidad de que se cumplan sus sueños de intolerancia”, dijo Ortega a Excélsior.

Publicidad

La iniciativa se llama Acta de Supresión de la Sodomía, la registró un abogado del condado de Orange hace unos días al llenar el único requisito, que es pagar 200 dólares, y ahora tiene que reunir poco más de medio millón de firmas de apoyo de electores registrados en California; si las consigue, la propuesta será presentada a los electores en los próximos comicios.

Ortega, quien dijo estar “tan indignado que me temo que puedo soltar algunas malas palabras”, concedió hablar vía telefónica y dijo que lo más importante es reconocer que a veces “la gente se equivoca, mira la Proposición 187, ahora 20 años después reconocen que fue un error, pero mientras nos hizo sufrir”.

La Proposición 187 proponía negar servicios médicos y de salud a los migrantes ilegales.

El Acta de Supresión de la Sodomía dice que porque la sodomía es un pecado que Dios sanciona, los californianos estarían autorizados a “matar de disparos a la cabeza” a los homosexuales en el estado.

La procuradora general y aspirante al senado, Kamala Harris, declaró que por ahora no hay nada que ella pueda hacer para impedir que la iniciativa avance, pero si llegara a juntar las 504 mil 960 firmas que necesita para registrarse, entonces su oficina actuará judicialmente.

Técnicamente, si la propuesta se registra pasa a la procuraduría para que revise los términos legales de la misma.

La idea es particularmente polémica en California, donde personalidades como la presidenta de la Cámara de Representantes estatal, Toni Atkins, está casada con una mujer; hay un senador homosexual, Mark Leno, y el estado acepta oficialmente los matrimonios entre personas del mismo sexo.

El primer funcionario que permitió que se casaran homosexuales en la historia de Estados Unidos, Gavin Newsom, actual vicegobernador de California y alcalde de San Francisco en 2004, cuando se unieron unas 415 parejas del mismo sexo, dijo ayer que le entristece “el ofrecimiento totalmente ilegal de matar a las personas por su derecho a elegir”.

Newsom, precandidato a gobernador de California, dijo lamentar que persistan ideas conservadoras y discriminatorias en el estado.

“Me encuentro a este tipo de personas en las calles todo el tiempo”, pero confió en que la iniciativa será desmantelada antes de llegar a las boletas electorales.

El Acta de Supresión de la Sodomía define a la homosexualidad como “un crimen abominable contra la naturaleza conocido como sodomía” contra el que “Dios nos da la libertad de suprimir el dolor de nuestra destrucción, como Él lo hizo contra Sodoma y Gomorra”.

Por lo tanto, según el autor de la iniciativa, el abogado Matt McLaughlin, los californianos estarían autorizados a dar “disparos a la cabeza o por cualquier otro método conveniente” a quien quiera que “toque a una persona de su propio sexo con el propósito de gratificación sexual”.

Quien se atreva a intervenir de cualquier forma en defensa de la homosexualidad, sería sancionado con “un millón de dólares, cárcel por diez años y la posterior expulsión del estado de California de por vida”.

“¿Alguna duda del odio racista de esa persona? Pero el autor está recurriendo a picar el ánimo de los fanáticos religiosos, y entre más de 38 millones de californianos sí podría encontrar a medio millón de personas que nos odian”, dijo Fernando Ortega.

 

 

 

Publicidad