Luego de que la cotización tocó terreno negativo este lunes, algo histórico, la mezcla mexicana de petróleo de exportación logró repuntar este martes, al terminar en 7.12 dólares por barril, un aumento de 9.49 dólares respecto a su precio previo.
Sin embargo, según estadísticas del Banco de México (Banxico), el petróleo mexicano se mantiene en sus niveles más bajos desde hace casi 22 años, cuyo precio similar fue 11 de diciembre de 1998 cuando cotizó en 7.04 dólares por barril.
De acuerdo con Banco Base, el contrato del WTI para la entrega de crudo en mayo recortó sus pérdidas, al aumentar en 126.60 por ciento y cerrar la sesión en 10.01 dólares por barril; a pesar del retorno de este contrato a terreno positivo, se debe mencionar que el colapso en el precio del petróleo se extendió a los contratos de los meses siguientes.
Lo anterior llevó al contrato del WTI para la entrega de crudo en junio a registrar una fuerte caída de 34.40 por ciento en su precio, al cotizar en 13.40 dólares por barril y tocar un mínimo intradía de 6.50 dólares.
“Esto es preocupante, ya que hace evidente la gravedad de la crisis petrolera y el hecho de que el mundo se está quedando sin lugar de almacenamiento, llevado a los operadores a deshacerse de estos contratos. Existe el riesgo de que al acercarse la expiración de los contratos de junio se vuelvan a ver precios negativos”.
Señaló que las medidas de cuarentena impuestas para limitar la propagación del coronavirus y mitigar la crisis sanitaria llevó no solo a una reducción drástica en los viajes aéreos y por carretera, sino también a una reducción en la actividad económica global.
Por lo que la destrucción en la demanda acentuó el exceso de oferta en el mercado, lo que a su vez ha llevado a que los tanques de almacenamiento, buques y oleoductos se saturen de manera acelerada, expuso Banco Base.