Los estudiantes exigen el fin al endeudamiento al que se ven obligados a contraer para seguir sus estudios
Miles de estudiantes chilenos marcharon este jueves para exigir el fin del lucro en la educación superior y el endeudamiento con la banca que se ven obligados a contraer para poder estudiar.
La marcha había concluido hacía casi dos horas cuando un grupo de muchachos que regresaban a su universidad se encontraron con carros policiales. Uno de éstos atropelló a un joven de 25 años egresado de Artes, según declararon sus compañeros, informó la prensa local y se observa en un vídeo que circula en redes sociales.
El joven quedó atrapado entre el vehículo policial y uno particular, desde donde fue rescatado por otros estudiantes y llevado a una centro asistencial, donde lo intervienen quirúrgicamente de una fractura de fémur expuesta.
La caminata autorizada por la principal avenida capitalina estuvo salpicada por algunos incidentes cuando puñados de manifestantes insistieron en marchar por las vías no autorizadas y fueron frenados por los chorros de agua de la policía antimotines.
Cuando la marcha se acercaba al final del recorrido, una treintena de encapuchados se desprendió de la columna y provocó a la policía lanzando petardos, piedras, botellas con pintura, desprendiendo señales de tránsito y prendiendo pequeñas fogatas.
Rodrigo Rivera, vocero de la Confederación de Federaciones de Estudiantes de Chile, que agrupa a universidades públicas y privadas, dijo en su cuenta de Twitter que “la marcha de hoy ha sido completamente exitosa. Sólo en Santiago somos 120 mil y en todo Chile más de 200 mil”.
La alcaldesa de Santiago, Karla Rubilar, dijo que según imágenes aéreas marcharon unos 30 mil estudiantes.
No se informó de detenidos.
Esta fue la primera demostración de fuerza en las calles que enfrenta elpresidente centroderechista Sebastián Piñera, quien pidió a los estudiantes marchar pacíficamente y dijo que, ahora, “la gran batalla es la calidad de la educación”.
Los estudiantes volvieron a marchar por el lucro en la educación que había sido prohibido por ley por el gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet (2014-2018). Pero la normativa fue calificada de ilegítima por el Tribunal Constitucional el 27 de marzo, que permitió a las empresas y organizaciones que buscan ganancias que se instalen como controladoras de planteles de educación superior.
El tribunal a menudo actúa como tercera cámara y tiene la facultad de revertir o anular cambios o leyes aprobados en el Congreso a petición de parlamentarios.
Tres informes del Ministerio de Educación obtenidos por la radio Bío Bío sobre el grupo Laureate, que controla tres universidades en Chile, concluyeron que “la actividad universitaria se instrumentalizó y desnaturalizó para beneficiar económicamente a sus controladores en desmedro de la calidad académica”, según publicó la radioemisora en su sitio de internet.
Los universitarios contraen préstamos leoninos que muchas veces terminan con mora, lo que da lugar a embargos de propiedades de sus padres.
En diversas ciudades del norte y sur del país se realizaron otras marchas.