El cáncer es un padecimiento muy temido por los resultados fatales que tiene en muchas ocasiones, sin embargo, si es detectado a tiempo puede ser tratable.
Recientemente se dio a conocer que una mujer descubrió que padecía la enfermedad gracias a un juego de feria.
Bal Gill de 41 años decidió entrar a una cámara oscura en Edimburgo, Escodia durante un viaje familiar en mayo.
Estando ahí, al pasar frente a una cámara térmica que permite a los visitantes ver un mapa de calor de todo el cuerpo, notó un punto ‘caliente’ en su pecho izquierdo, algo que no ocurría con los demás.
Al darse cuenta de esto decidió tomar una fotografía.
Ya en casa comenzó a investigar acerca de cámaras termográficas y descubrió que estas pueden ser usadas en oncología como herramienta para diagnosticar cáncer. Tras pedir una cita con su médico, fue diagnosticada con cáncer de mama en etapa temprana.
La mujer, quien ahora está esperando una tercera cirugía para evitar la propagación de la enfermedad, decidió ponerse en contacto con la atracción turística para mostrarles su agradecimiento:
“Solo quería decir gracias: sin esa cámara nunca lo hubiera sabido. Sé que no es la finalidad de la cámara, pero para mí realmente fue una visita que me cambió la vida».
Andrew Johnson, gerente general de la atracción, comentó asimismo el caso:
“No nos dimos cuenta de que nuestra cámara térmica tenía el potencial de detectar síntomas que cambian la vida de esta manera. Realmente nos conmovió cuando Bal nos contactó para compartir su historia, ya que el cáncer de mama está muy cerca de mi casa y de la de parte de nuestro equipo».