Nayarit está inmerso en una disputa de las células del crimen organizado, y sus acciones han dejado al menos 49 cadáveres en seis fosas clandestinas, más de 228 asesinatos y 173 desapariciones forzadas, en el último año del sexenio del priista Roberto Sandoval y los tres primeros meses del mandato del actual gobernador, Antonio Echevarría.
Según el fiscal general del estado, Petronilo Díaz Ponce, la violencia en la entidad, en el último año, “es un proceso de reacomodo entre bandas delincuenciales (…) se debe a la disputa de la plaza, del trasiego y venta de la droga”, dijo a El Financiero.
También señaló que los hechos violentos se han focalizado y que, a diferencia de 2010, cuando se conoció una de las etapas más violentas del estado, no hay ataques a la población abierta, y que muchas de las ejecuciones son relacionas con estas actividades delictivas.
Sobre esto último, el fiscal aseguró que el hallazgo de marcas, mensajes o el modo en cómo se han realizado la mayoría asesinatos –qué contó en 228 dolosos–, y según avances periciales, hay evidencia de su relación con el crimen organizado.
El fiscal general subrayó que el tipo de delitos que se han presentado en esta ola de violencia son de competencia federal, debido a que se trata, en la mayoría de los casos, “de homicidios llevados a cabo con armas de fuego, de uso exclusivo del Ejército”, por lo que demandó mayor participación del gobierno federal para el combate y persecución de estos hechos.
El funcionario declaró que no existe hasta el momento una denuncia formal sobre una presunta relación entre el exfiscal Édgar Veytia, detenido en Estados Unidos –y varios excomandantes de Policía Nayarit– con la delincuencia organizada que opera en la entidad, que son los Beltrán Leyva, Cártel de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.
“Hay otras denuncias o imputaciones por su desempeño como funcionario público, pero no relacionadas con el narcotráfico”, dijo.
También se registran desapariciones forzadas, indicó el fiscal, e informó que existen 173 denuncias formales –aunque colectivos de familias cuentan 306– pero se ha localizado con vida a 63 personas, y 16 sin vida.
Respecto de las fosas clandestinas, en lo que va de este año, hay un saldo de 33 cadáveres rescatados.
Desde septiembre pasado se contabilizan 49 cuerpos.
Petronilo Díaz destacó que la participación de familiares en la búsqueda ha sido primordial para la realización de los hallazgos y que reciben apoyo de la institución en medida de la competencia legal de la fiscalía estatal.