Los pañales de tela fueron cosa del pasado cuando se crearon los pañales desechables: cómodos, prácticos y no involucraban tener que tallar y tallar. ¡Ganar, ganar para todos! ¿Cierto?
Claro, para todos menos para el medio ambiente. Y con los problemas que hemos tenido con la contaminación ambiental en los últimos años cada vez son más las personas que se suman a los movimientos anti-contaminación, cambiando el coche por la bici (o, al menos, por uno eléctrico), instalando páneles solares en sus casas, evitando comprar agua embotellada y… sí, regresando al pañal de tela.
Si quieres ser parte del cambio y dejarle a tu hijo un mundo mejor (¡con menos contaminación!) aquí te damos los mejores consejos para hacer la transición:
¿Qué necesitas?
Usar pañales desechables es conveniente porque simplemente los compras en la tienda cuando los necesitas. Pero los pañales de tela funcionan un poco diferente, tienes que pensar en más cosas como: ¿dónde los vas a guardar entre lavadas? ¿Cuántos necesitas tener? ¿Cómo los vas a lavar?
El kit básico para empezar debe incluir:
-Suficientes pañales para al menos 3 días. Considera tener entre 24 y 36 pañales para un recién nacido (aproximadamente 12 pañales para cada día). -Toallitas. Las toallitas de tela también deben ser parte del cambio. Si optas por usarlas considera tener entre 12 y 24 toallitas. Las puedes guardar ya húmedas o mojarlas conforme lo vayas necesitando. Las toallitas están disponibles en distintas telas, incluyendo franela, algodón y velur. -Bote de ropa sucia. Necesitas un bote separado al de la ropa normal. Busca uno que sea contra agua y con tapa para evitar que los olores salgan. -Mini bolsa de viaje. ¿Que harás con los pañales cuando salgas de casa? Es importante que tengas la versión mini de tu bote de ropa sucia, una bolsita también forrada con tela contra agua, en la que puedas guardar los pañales sucios cuando estés fuera. -Rociador de pañales. Los rociadores se adaptan al escusado y son una especie de regadera que te permite enjuagar los pañales sucios directamente en el escusado. -Seguros. Son importantes para asegurar los pañales adecuadamente al cuerpo de tu bebé.
Tipos de pañales
El mundo de los pañales de tela es enorme y contiene una amplia variedad para cubrir todas tus necesidades.
Pañales predoblados: son rectangulares y están divididos a lo largo en tres secciones, se pueden cerrar con velcro o con seguros.
Pañales con bolsillo: tienes 3 capas, una capa exterior a prueba de agua, una cubierta interior para mantenerlo seco y un bolsillo para el inserto absorbente.
Pañales ajustados: son similares a los pañales desechables, pero se ajustan con velcro o con seguros. Vas a necesitar una capa exterior a prueba de agua.
Pañales todo en uno: son pañales ajustados que ya incluyen la cubierta exterior.