La escritora en su obra narra parte de la historia que vivieron las obreras de la Textil de Bellavista en su lucha laboral

Dalinda Sandoval autora del libro “Obreras Deshilando Ausencias” platicó con la reportera Sara Caz que este jueves presentó en el Festival de Letras de Tepic, que tuvo como sede el Centro de Arte Contemporáneo “Emilia Ortiz” en el cual describe de la voz de algunas trabajadoras que pudieron dar testimonio de lo que aconteció en los momentos que se vivieron en la lucha laboral en la fábrica textil de Bellavista.

La escritora nos comenta su motivación para la realización de esta obra, que en principio para ella fue una gran sorpresa que Festival Letras de Tepic haya sacado una convocatoria para todos aquellos que tuvieran un libro pudieran presentarlo. Obreras Deshilando Ausencia queda entre los que se presentan en esta jornada, para ella significa mucho porque es una manera de que las personas conozcan lo que ella hace.

Dijo además que para ella fue muy grato el ver que muchos jóvenes de las diferentes carreras afines al tema que se aborda en el libro estuvieron presentes, como comunicación y medios y de la escuela de artes que se interesaron en esta publicación y se hace a nivel local. Es bueno que vengan grandes escritores, pero también es bueno que se les dé la oportunidad a quienes apenas inician en el mundo de las letras escritas.

Importante mencionar que es algo que ella tenía que hacer, desde sus abuelas, que participaron activamente en la fábrica como obreras y que de alguna fueron partícipes de estos acontecimientos históricos. Ella como profesional del estudio de género se interesó por la lucha de las mujeres que hicieron y hacen, por lo que se interesó en rescatar la lucha de estas mujeres como las hermanas Quintero, Adelaida.

Agregó que su bisabuela que no era obrera daba que asistencia y comida a los ingenieros y algunos trabajadores de la fábrica, pero también se incorpora en esta lucha obrera, ya que las mujeres eran las que iban adelante en la lucha.

Esto fue lo que la motivó a plasmar en letras las vivencias y recuerdos de sus abuelas que eran obreras que no pudieron ya contar la historia de viva voz, pero que si hubo quienes después de tantos años pudieron recordar y placar con ella para contar en esta obra parte de estos grandes acontecimientos que se vivieron en nuestro estado y municipio, indica.

Es claro que en esos momentos Bellavista tenía una gran característica en la comunidad, donde la gran mayoría de las mujeres eran obreras de la fábrica textil, que las últimas que ahora todavía viven y pueden dar fe de algunos hechos o datos, son aquellas que trabajaron en la última etapa antes de cerrar la fábrica.

Lo que espera Dalinda de su libro, es que la voz de estas mujeres quede en estas líneas del libro sus anécdotas y sus vivencias que la voz de las mujeres