El papel jugado la víspera por el presidente Donald Trump en la incitación a la violencia en el Capitolio y su negativa a reconocer su derrota electoral está impulsando a algunos legisladores a sopesar su destitución del cargo, como prevé la 25ta Enmienda a la Constitución.
La enmienda permite al vicepresidente y a la mayoría del gabinete declarar a un presidente no apto para el cargo. El vicepresidente se convierte entonces en presidente en funciones. La sección de la enmienda que trata específicamente de este procedimiento nunca ha sido utilizada.
El jueves, un día después de que una turba de seguidores de Trump irrumpiera en el Capitolio, el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, pidió la destitución inmediata de Trump. “Lo que sucedió ayer en el Capitolio de Estados Unidos fue una insurrección contra Estados Unidos, incitada por el presidente.
Este presidente no debería ocupar el cargo ni un día más”, agregó Schumer.
En comentarios publicados en Twitter, el representante Adam Kinzinger, republicano por Illinois, pidió al gabinete que invocara la enmienda.
El presidente no está apto. Y el presidente no se encuentra bien”, escribió Kinzinger. Dijo que Trump “ahora debe ceder el control del poder ejecutivo de manera voluntaria o involuntaria”.
A continuación, algunas preguntas y respuestas sobre la 25ta Enmienda:
¿POR QUÉ SE APROBÓ?
El impulso para una enmienda que detalle los planes de sucesión presidencial en caso de discapacidad o muerte de un presidente siguió al asesinato del presidente John F. Kennedy en 1963. El presidente Lyndon B. Johnson en su discurso del Estado de la Unión de 1965 prometió “proponer leyes para asegurar la necesaria continuidad del liderazgo en caso de que el presidente quede discapacitado o muera”. La enmienda fue aprobada por el Congreso ese año y ratificada en 1967.
¿SE HA INVOCADO ANTES LA 25ª ENMIENDA?
Sí, los presidentes de Estados Unidos han cedido temporalmente el poder, pero esos casos han sido generalmente breves y voluntarios, por ejemplo, cuando un mandatario se sometió a un procedimiento médico.
En 2002, el presidente George W. Bush se convirtió en el primero en utilizar la Sección 3 de la enmienda para transferir temporalmente el poder al vicepresidente Dick Cheney mientras Bush estuviera anestesiado para ser sometido a una colonoscopia. La sección 4 de la enmienda, que permite al gabinete declarar al presidente no apto, nunca se ha invocado.
¿CÓMO PUEDE EL GABINETE DECLARAR QUE EL PRESIDENTE NO ES APTO?
La Sección 4 de la 25ª Enmienda establece lo que sucede si el presidente no puede cumplir con sus deberes, pero no transfiere el poder al vicepresidente.
El vicepresidente y la mayoría del gabinete pueden declarar al presidente no apto para ejercer el cargo. Luego deberán indicarlo así en una carta que deben enviar al presidente de la Cámara de Representantes y al presidente pro tempore del Senado. El vicepresidente se convierte entonces en presidente interino.
El presidente puede enviar su propia carta diciendo que está en condiciones de servir, pero si el vicepresidente y la mayoría del gabinete no están de acuerdo, pueden enviar otra carta al Congreso dentro de cuatro días. Entonces el Congreso tendría que votar. El presidente reanudará sus funciones a menos que ambas cámaras del Congreso, por un voto de dos tercios, digan que el presidente no está apto para ejercer el cargo.
¿NO HAY ALGUNA OTRA LEGISLACIÓN SOBRE ESTO?
La sección 4 de la enmienda también le da al Congreso el poder de crear un “cuerpo” que puede, con el apoyo del vicepresidente, declarar que el presidente no puede hacer su trabajo. Si están de acuerdo en que el presidente no es apto, el vicepresidente se hará cargo. El Congreso, sin embargo, nunca ha creado ese cuerpo.
En octubre pasado, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, demócrata por California, anunció una iniciativa de ley que proponía la creación de una comisión que desempeñara ese papel.
La legislación establecería una comisión bipartidista de 16 miembros elegida por los líderes de la Cámara y el Senado. Incluiría cuatro médicos, cuatro psiquiatras y ocho figuras públicas jubiladas, como expresidentes, vicepresidentes y secretarios de Estado. A continuación, esos miembros seleccionarían a un miembro número 17 para que actuara como su presidente.
Una vez que la comisión estuviera lista, el Congreso podría aprobar una resolución que requiera que sus miembros examinen al presidente, determinen si el presidente está incapacitado y emitan un informe.