Pese al interés de la Casa Blanca, el secretario de Defensa de Estados Unidos aseguró que sólo contemplará instalar vallas, por seguridad, en aquellos terrenos en los que se realicen maniobras militares
Pese al interés de la Casa Blanca, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, rechazó este jueves que el Pentágono vaya a financiar el muro fronterizo.
Asimismo, aseguró que sólo contemplará instalar vallas, por seguridad, en aquellos terrenos en los que se realicen maniobras militares cerca de la frontera.
Al ser cuestionado en el Congreso por el legislador Beto O’Rourke sobre bajo qué circunstancias construiría el Pentágono un muro fronterizo, Mattis respondió:
“Probablemente sólo en la parte en que necesitaría un muro o una valla para proteger una maniobra de artillería próxima a la frontera. Esto sería una medida de seguridad”.
Estas declaraciones del secretario, realizadas durante su intervención ante el comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, contrastan con el deseo del presidente Donald Trump.
A finales de marzo, el mandatario sorprendió con la idea de que el Pentágono contribuyera a financiar la construcción del muro por tratarse de un asunto de Seguridad Nacional y ante la negativa del Congreso a aprobar los 25 mil millones de dólares necesarios para el proyecto.
“Construir un gran muro fronterizo, con (todas) las drogas y combatientes enemigos que entran en nuestro país, tiene que ver con la Defensa Nacional. ¡Construyamos el Muro mediante el M!”, escribió entonces el presidente, en clara referencia al Ejército (‘Military’ en inglés).
Posteriormente, Trump optó por desplegar soldados de la Guardia Nacional a lo largo de la frontera sur del país hasta que encuentre los fondos necesarios para levantar el muro, que fue una de las grandes promesas de su campaña electoral, en 2016.
Mattis informó de que en estos momentos cerca de 800 reservistas están ya desplegados en la zona a petición de los distintos gobiernos estatales y, añadió que espera que los gobernadores de los estados fronterizos soliciten el envío de otros 700.
Estos militares, explicó, no se implicarán en tareas policiales ni entrarán en contacto con aquellas personas que intenten entrar ilegalmente en el país, sino que se limitarán a tareas de vigilancia.
Cuestionado sobre la importancia que tienen los inmigrantes para las Fuerzas Armadas, Mattis destacó que, por lo general, los hijos de los inmigrantes ilegales se han alistado a niveles más altos que los nacidos en Estados Unidos, por lo que abogó por encontrar una solución al problema de la inmigración.
“Necesitamos a todos aquellos patriotas cualificados con los que podamos contar, pero no apoyamos actividades ilegales”, concluyó.