La tenista número uno de la WTA derrota por parciales de 6-2, 4-6 y 7-5 a Heather Watson
La estadounidense Serena Williams, número uno del mundo, resistió este viernes en Wimbledon la dura oposición que le planteó la británica Heather Watson (6-2, 4-6 y 7-5, en dos horas y 14 minutos) y jugará los octavos de final ante su hermana Venus.
La tenista local, número 59 en el ránking de la WTA, le arrebató el segundo set a la cinco veces campeona en el All England Club y llegó a ponerse 3-0 por delante en el tercer parcial.
Williams, de 33 años, que ha llegado en siete ocasiones a la final del Grand Slam sobre hierba, logró llevarse el duelo en su tercera bola de partido.
“Ha sido el encuentro más difícil que he jugado en la pista central” , admitió la estadounidense tras un duelo en el que el público londinense se volcó para animar a Watson, que ha disputado Wimbledon en seis ocasiones y nunca ha logrado superar la tercera ronda.
La británica “estaba jugando tan bien que yo no podía hacer nada” , relató Williams, que llegó a aplaudir sobre la pista algunos de los tiros que le lanzaba la Watson.
En su siguiente compromiso, Serena se medirá a su hermana Venus, de 35 años y décima sexta cabeza de serie en el torneo, a quien ha ganado en 14 de las 25 ocasiones en las que se han enfrentado.
“Ella está en mejor forma que yo, así que llega con algo de ventaja a ese partido. De todas formas, una de las dos estará en cuartos, eso es positivo” , afirmó Serena.
Djokovic, inflexible con Tomic
El serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, se mostró este viernes inflexible ante el australiano Bernard Tomic, 26 del ránking, y continuó adelante en su defensa del título de Wimbledon (6-3, 6-3 y 6-3, en una hora y 32 minutos) .
Djokovic se ha plantado casi sin esfuerzo en los octavos de final en el All England Club por séptimo año consecutivo y se medirá ahora al surafricano Kevin Anderson, décimo cuarto del ránking de la ATP, que esta tarde tumbó al argentino Leonardo Mayer en tercera ronda.
Con 16 saques directos y un 72 por ciento de acierto en sus primeros servicios, el serbio dominó en todos los aspectos del juego y solventó el duelo en apenas noventa minutos por tercera vez en este campeonato.
“Hasta ahora todo ha funcionado genial. Esperaba poder mejorar a medida que avanzara el torneo y eso es exactamente lo que está pasando. Cada vez me encuentro con más confianza en la pista, con más control en los tiros desde el fondo” , analizó el número uno del mundo tras el partido.
“Quizás desde fuera parece que todavía no me he puesto a prueba, pero me he medido a buenos jugadores, especialmente hoy con Bernard, que tiene un enorme talento” , señaló Djokovic, que no ha perdido un solo set en las tres primeras rondas.
El serbio aspira a ganar su tercer Wimbledon -conquistó el título en 2011 y 2014- y a quitarse el mal sabor de boca que le dejó el último Roland Garros, en el que perdió la final contra pronóstico ante el suizo Stanislas Wawrinka.
Santiago González se despide
El tenista mexicano fue eliminado de los dobles varnonil y de los dobles mixtos
Tampoco pudo ser en mixtos para el tenista mexicano Santiago González, quien luego de despedirse en dobles la mañanade ayer
, sufrió su segunda derrota del día en Wimbledon, pero ahora en compañía de la estadunidense Abigail Spears.
Con aproximadamente dos horas de descanso, el veracruzano volvió a aparecer en el césped de la Cancha 16 del All England Club para sacarse la espinita por el adiós que había padecido en el evento varonil por parejas.
Pero el desgaste del primer cotejo pasó factura a Santy para el segundo y, junto a su pareja, fue anulado por el binomio australiano conformado por Casey Dellacqua y Lleyton Hewitt por pizarra lapidaria de 6-4 y 6-2.
Rusty, ex número uno del mundo como singlista, se resiste a despedirse por completo de la Catedral del Tenis (ya que se retirará en enero de 2016) y, apoyado por su compatriota, sacó jugo al pobre servicio de la dupla norteamericana, la cual no pasó de 60 por ciento de efectividad con ninguno de los dos intentos.
Así pues, González Torre y Spears se quedaron lejos de ser la sólida mancuerna que tiene en su palmarés dos subcampeonatos seguidos del Abierto de Estados Unidos, ya que cedieron cuatro veces su saque y el balance de siete aciertos a cambio de igual cifra de pifias, los obligó a despedirse de este draw tras sólo 57 minutos.