El 90 por ciento de los menores llegan golpeados a la escuela

Decenas de niños indígenas que viven en la colonia Zitacua de Tepic se encuentran en graves condiciones, son agredidos física y emocionalmente por sus padres, e incluso entre los mismos menores se acosan en la escuela, así lo denunció públicamente uno de los maestros de la primaria de la Zitacua, José Carrillo Rentería.

Puntualizó que el 90 por ciento de los 115 alumnos de sexto grado -a los que él les da clases- llegan golpeados diariamente, además son descuidados por los padres de familia, ya que los menores no van bien comidos, con ropa en buenas condiciones y mucho menos hacen las tareas.

“Es un foco rojo de violencia, yo trabajo ahí y los niños nos llegan golpeados por parte de los padres, las mamás, ellos no se preocupan por la alimentación de sus hijos, los útiles que ocupan, los beneficios que reciben de las autoridades son para tomar alcohol, la beca, oportunidades y todo eso, entonces queremos que ya se cambie la forma de dar apoyos, que sea de otra forma”, dijo el docente.

Carrillo Rentería explicó que ya presentó una solicitud de apoyo ante la SEP y el DIF, para que implementen acciones concretas para apoyar a los niños, ya que la situación de la violencia familiar ha ocasionado que se den bastantes casos de bullying en la escuela de la Zitacua.

En su opinión, dijo que se le debe dar prioridad a capacitar a los padres de familia sobre cómo educar con valores, y lo más importante apoyarlos a que dejen de consumir alcohol, porque asegura que ese es el origen de la conducta “Desentendida” hacia sus hijos.

“Le hemos solicitado que tengan en que entretenerse los niños, por ejemplo realizando eventos deportivos, haciéndoles platicas y conferencias a las madres principalmente, porque eso es lo que más se ocupa. Los acontecimientos que los niños ven en el hogar lo representan en la escuela, porque ellos ven que así los tratan en sus casas, que su papá y mamá se agreden entre ellos y lo ven y ellos ya en la escuela también quieren pelearse, empujarse y agredirse verbal y físicamente”, concluyó.