La reciente imposición de aranceles de EE.UU. a productos canadienses ha encendido las alarmas sobre la estabilidad del T-MEC. Mientras México y Canadá apuestan por mantener el formato trilateral, en Washington crecen las voces que impulsan acuerdos bilaterales que otorguen mayor control a EE.UU.
El internacionalista Miguel Sigala (UdeG) advierte que esta tensión no es aislada, sino parte del estilo político de Donald Trump, quien privilegia negociaciones agresivas y unilaterales. “Divide y vencerás”, resume el especialista, al señalar que EE.UU. busca evitar una alianza sólida entre México y Canadá.
Además, Canadá comienza a replantear su estrategia comercial, con señales de nacionalismo económico y menor confianza en EE.UU. como socio confiable. El primer ministro canadiense, Mark Carney, lo dijo claro: “La relación económica con EE.UU. es una vulnerabilidad para Canadá”.
¿Qué está en juego?
- La confianza entre socios del T-MEC
- El poder de negociación trilateral
- La estabilidad comercial en América del Norte
México y Canadá coinciden en mantener el formato trilateral, que les permite influir más en las decisiones de Washington. Pero la presión por dividir el bloque sigue latente.