¡Te decimos cómo soportar la cuesta de enero!

Diciembre ha quedado atrás y las deudas ya están aquí. Enero sugiere una fecha en la que las deudas acumuladas de fin de año comienzan a tomar vida.

La cuesta de enero no es un mito, es una realidad y todos los mexicanos lo resentimos año con año.

Una vez en ella, la recomendación es que de las múltiples deudas que pudiste haber adquirido comiences a liquidar las de menores montos, de las que puedas salir más rápido.

Si la deuda que tienes es con una tarjeta de crédito que su tasa de interés es muy elevada, existen posibilidades de transferir la deuda a otras tarjetas que ofrecen una tasa más baja.

Dentro de las tarjetas de crédito, dependiendo del banco, existe la posibilidad de mandar tu deuda a meses con un interés fijo.

Si está dentro de tus planes pedir un préstamo, ve más opciones, no es cualquier cosa y ve qué producto ofrece la menor tasa de interés mensual, si es fija o variable.

Aunque sea una temporada de rebajas, limita un poco tus deseos, si no seguirás endeudado de por vida.

Cuando consideres adquirir una deuda para liquidar otra, la sugerencia es que liquides la deuda que tenga la tasa más alta y que la de tu préstamo no sea más alta que la que liquidarás.

Toma en cuenta que aunque la tasa de interés sea baja, el plazo que establezcas para liquidar el adeudo, puede incrementar también el monto de la deuda.

Algo inevitable para soportar un poco más la cuesta de enero es reducir sin duda alguna los gastos. Reduce por un tiempo los gastos como cenas fuera de casa, entretenimiento, etc…

Evita en la medida de lo posible los gastos hormiga, cuida el consumo de electricidad, agua y gas, utilízalo únicamente en la medida de lo necesario