No puedo fallarles, porque las opciones independientes son el último aliento de esperanza que tiene el pueblo para salir adelante
El rector de la Universidad Vizcaya de las Américas, Jorge Richardi, admitió que es el aliento de las personas lo que lo ha motivado y estimulado para ingresar a la política, y que son ellas las que le ayudan a prender el motor y salir adelante en su afán de transformar su entorno y ayudar a que en la municipalidad haya mejores servicios y una idónea calidad de vida.
“Vale la pena por toda esa gente que confía en mi proyecto, por toda esa gente que conozco cada vez que voy a colonias, por las familias que carecen de drenaje, que no tienen calles arregladas; por ellas vale la pena salir… e impulsar desde mi espacio y dentro de la ley las transformaciones que el pueblo demanda”, dijo categórico.
El exitoso empresario, quien con la cultura del esfuerzo ha consolidado la Universidad Vizcaya de las Américas —la cual tiene 20 planteles en el país, más de 35 mil alumnos y genera 5 mil empleos directos—, reconoció que hasta hace poco estaba en una fase cómoda: llegaba a su oficina, atendía sus asuntos y salía adelante con los temas propios de su función.
“Un estado logrado con esfuerzo, trabajo y honestidad; de repente dije: no es lo que quiero para mi vida porque todavía puedo dar más; tengo 48 años y puedo dar más y no solamente para la empresa para la que yo estoy totalmente entregado, puedo dar más a mi ciudad, y por eso estamos trabajando”, indicó.
“Soy un ser humano, y cuando me levanto todos los días me surge el ánimo de hacer las mejores cosas por toda la gente que confía en mi persona. Yo digo que por los tepicenses vale la pena el esfuerzo y el trabajo que pueda hacerse”, agregó.
“Y no puedo fallarles, porque las opciones independientes son el último aliento de esperanza que tiene el pueblo para salir adelante, ante el fracaso y el derrumbe de los políticos y los partidos que los abanderan”, concluyó Jorge Richardi.