Rosa Isela Guzmán Ortiz asegura que sus declaraciones sobre su padre, Joaquín “El Chapo” Guzmán, fueron una “broma” que hizo en un café con una amiga
Rosa Isela Guzmán Ortiz asegura que sus declaraciones sobre su padre, Joaquín “El Chapo” Guzmán, fueron una “broma” que hizo en un café con una amiga, mencionó el abogado Juan Pablo Badillo, representante legal del líder del Cártel del Pacífico.
En días pasados, el periódico británico The Guardian publicó una entrevista que el periodista mexicano José Luis Montenegro realizó a la hija mayor de Guzmán Loera, en la que la mujer acusó a otros narcotraficantes de traicionar a su padre, y a autoridades mexicanas de protegerlo a cambio de recibir dinero para sus campañas políticas.
‒¿Niega que le haya dado entrevista al reportero Montenegro? ‒preguntó Adela Micha al abogado Badillo, en entrevista con Grupo Imagen Multimedia.
‒Buena, ella a mí me dijo: “Me han inventado muchas cosas”. Dice: “En una ocasión yo estuve bromeando con una amiga, en un café; ella me decía que yo era hija de fulano de tal, y la broma empezó ahí, y yo, pues le contesté, pero a manera de broma”.
El abogado, quien dijo confiar en que la mujer sí es hija de Joaquín Guzmán, no aclaró sin embargo si en esa reunión en el café estuvo presente el reportero Montenegro, quien ha afirmado que tiene grabada la entrevista realizada en julio de 2014.
Juan Pablo Badillo dijo que Rosa Isela Guzmán nunca pensó que la “broma” llegaría lejos, pero aseguró que la joven sí afirma ser hija de Guzmán Loera.
‒¿Es o no es hija de “El Chapo”? ‒insistió la conductora de “La Primera por Adela”.
‒Bueno, eso ya es una situación de carácter familiar…Ella sí dice ser hija del señor Joaquín Archivaldo Guzmán Loera.
Pero, añadió el abogado, “la broma era en otro sentido; dice que estaban, en el lenguaje nuestro, chacoteando por ahí, y pues a la ligera siguió la plática, dice, pero nunca pensó que llegara a estos extremos”.
“Ella se encuentra en un torbellino absurdo; es decir, le inventaron una serie de declaraciones que ella asegura que no virtió (sic). Entonces he salido a los medios de comunicación para desvirtuar, para desmentir esa situación”, sostuvo el representante legal.
Al insistirle en que ella dio la entrevista, respondió que a él no le consta y que no podía afirmar ni negar que así haya sido.
“No está legalmente demostrado que haya sido ella la que haya realizado esas supuestas declaraciones. Ella niega”, recalcó.
SE DICE ACOSADA
El abogado aseguró que, tras las supuestas declaraciones de la mujer, ahora ella está siendo acosada por autoridades de California, donde radica, quienes la desalojaron de su vivienda para investigar la propiedad, por lo que él aceptó ya representarla jurídicamente.
“Se ve acosada por las autoridades, intimidada, perseguida, no por los periodistas, por las autoridades.
“Ayer y antier le rodearon su casa allá en California, la Policía. Ella ya no está viviendo ahí porque la desalojaron para supuestamente investigar si había huellas dactilares y a ver qué elementos de delito tenía en su casa. Ella dice: ‘aquí está mi casa’”.
“Está sumamente preocupada, aterrorizada por decir algo, por esta situación. Estuvieron ahí la Policía (estadunidense) y entonces llegaron y ella salió a decir: ‘estoy a sus órdenes’; pues le dijeron que estaba sujeta a una investigación y que le pedían que desalojara su casa. Dijo: ‘aquí está mi casa’”.
‒¿Ya no vive ahí?
‒No. Temporalmente tuvo que salirse el día de ayer, junto con sus niños, sus hijos… Ella puso a su disposición su casa voluntariamente.
El abogado Badillo dijo desconocer si en esa supuesta diligencia la Policía llevaba orden de cateo.
“Ella me dijo que le habían pedido que desalojara su casa y ella de buena voluntad dijo: ‘aquí está mi casa’”.
“Inclusive me dijo: ‘Todas las llamadas que se hacen a mi teléfono ya las está viendo en la televisión’. Le dije: ‘eso se llama espionaje telefónico’”.
‒¿A usted le consta que es quien dice ser?
‒Físicamente no la conozco. Ella me buscó y me manifiesta ser hija de mi defendido Guzmán Loera. Ella me comentó: “Yo estuve con mi papá en Sinaloa el mes de diciembre”, dice, “y tuve la oportunidad de convivencia con él”.
‒¿De qué la está defendiendo?
‒No hay en este momento una causa penal en contra de ella…Ella me pide nada más asesoría y hasta este momento se la he otorgado.
‒¿Piensa viajar a verla?
‒En este momento no.
‒¿Ella piensa venir a México?
‒Así me lo había manifestado que ella su intención es venir acá y ante las autoridades hacer las aclaraciones…Hay cosas que ella jamás dijo porque no le constan, que son falsas…Quiere visitar a su papá.
‒Usted, ¿habla con alguien de la familia de “El Chapo”?
‒Sí. Por ejemplo, con la señora Emma (Coronel Aispuro), su esposa. Ayer y anteayer estuvieron ellas en comunicación directa.
NIEGA GOLPE MEDIÁTICO
El abogado negó la existencia de una campaña mediática para victimizar a su cliente y aseguró que es real el deterioro en la salud del narcotraficante debido a las condiciones en que se encuentra en el penal de máxima seguridad del Altiplano, donde se le aplica un estricto protocolo para garantizar que no vuelva a escapar.
“La autoridad está diciendo que el hecho de que los defensores pidamos que se le respeten sus derechos humanos, sus garantías individuales en cuanto a la comunicación, osea que lo tienen marginado en cuanto al trato cruel y degradante que prevé el artículo constitucional; dicen que son golpes mediáticos, que no, no existen; sin embargo la salud del señor Guzmán se está deteriorando cada día, de tal grado que dos de sus hijas y su esposa Emma estuvieron el domingo, este domingo pasado, con él, y lo vieron en una situación tremenda, totalmente deteriorado, tembloroso, con un color demacrado, de amarillo intenso; dicen que no coordinaba inclusive bien sus pensamientos; que ya ni siquiera sabía qué medicamentos estaba ingiriendo.
“No son golpes mediáticos. Hemos pedido los defensores que todos los medios de comunicación que pidan a la autoridad que les presenten al señor Guzmán, para que tengan la oportunidad de ver directamente la situación caótica en que se encuentra”, concluyó.