Un estudio de la Universidad de Lund, Suecia, asegura que hay una relación comprobada entre la reducción de las tallas del busto y el consumo de café, pues este altera un gen que puede disminuirlo hasta en un 17 %.
Los investigadores aseguran que después de 3 tazas de café es cuando se hace evidente el riesgo. Su consumo excesivo aumenta los niveles de estrógenos, y este desbalance produce un desequilibrio que es riesgoso para la salud.
Sin embargo, el estudio también aclara que esto pasa solo cuando el consumo es excesivo, ya que tomar 1 o 2 tazas podría otorgar efectos positivos y hasta causar el efecto contrario, y evitar el desarrollo de cáncer en el organismo.